LAS CRIADAS (****)

Los que recordamos los años en que Nuria Espert, de la mano de Víctor García, puso de moda una forma de hacer teatro distinta de la que se hacía en España en los años sesenta, no podemos dejar de hacer comparaciones de aquel montaje suyo con el que acabamos de ver en el Teatro Municipal Pedro Muñoz Seca. En aquella ocasión Nuria Espert estuvo acompañada en la escena por Julieta Serrano y Mayrata O´Wisiedo. Con el director teatral Víctor García, Nuria Espert inauguró una colaboración que no pudo prolongarse el tiempo deseado, pero que hizo que en el año 1969 se abriera paso un nuevo tipo de teatro en la escena española, que ha perdurado hasta nuestros días. La obra escrita por el dramaturgo Jean Genet se había estrenado en París en 1947, recibiendo críticas demoledoras, pero, años mas tarde, llegó a ser considerada, como lo es ahora, una de las cumbres dramáticas del teatro contemporáneo.

Luis Luque es ahora el director de esta versión de Las criadas realizada y traducida por Paco Becerra que cuenta con la interpretación de Alicia Borrachero como Solange, Jorge Calvo como La Señora y Ana Torrent como Claire, los tres personajes que mantienen unas tortuosas relaciones en un espacio escénico minimalista diseñado por Mónica Boromello con dos pantallas que acotan el espacio en que se mueven los actores y en las que a veces vemos grabaciones, todo un acierto, de cosas que ocurren fuera del escenario y en medio, un pequeño círculo elevado, una tarima circular en movimiento, que se convierte en una pieza indispensable del desarrollo de la función, con un gran ramo de rosas rojas en el centro, iluminado todo ello por una luz metálica diseñada por Felipe Ramos. Almudena Rodríguez Huertas es la creadora del vestuario muy a juego con el decorado, monos blancos para las criadas y un lujoso vestido para la Señora.

En el silencio de la noche, las dos criadas, Claire y Solange, hermanas, que sirven a una vieja y viciosa aristócrata, celebran una ceremonia macabra, un ritual diabólico donde se mezclan la realidad y sus deseos mas secretos y profundos y unas veces, en esa noches, Claire es la Señora y Solange es Claire mientras en otras ocasiones, la Señora es Claire y Claire es Solange.

Alicia Borrachero interpreta de forma magistral a Solange, al igual que Ana Torrent que, en su papel de Claire, es dominadora unas veces y dominada otras, sin que desmerezca de las dos, Jorge Calvo, en su papel de Señora, altiva y dominante. Este personaje tarda en aparecer en escena pero cuando lo hace mantiene el elevado y difícil nivel de las interpretaciones de las dos actrices, ofreciendo una “Señora” caprichosa, femenina, aunque sin ocultar su condición de hombre, por encima de las dos mujeres que le sirven, manteniendo frente a ellas una distancia de clase, una barrera casi imperceptible a nuestros ojos, que la separa de los seres serviles que viven bajo su techo.

Los blancos y azules limpios de la decoración, y la asepsia del conjunto, casi de ciencia ficción, como de hospital o clínica sanitaria, hacen que la señora y las criadas no nos hagan situarlas en una época determinada, ni esta ni ninguna otra. Las vemos como si flotaran en un espacio no perteneciente a un lugar o a un tiempo determinado.

Es difícil poder ver obras serias y de esta envergadura y el público que llenó nuestro Teatro Pedro Muñoz Seca, así lo consideró y así lo expresó. Aparte de los aplausos, fueron numerosos los “corrillos” de aficionados que se quedaron a la salida de la función en el “foyer”, comentando el espectáculo al que habían asistido y que, a buen seguro, recordarán durante mucho tiempo.