Flamenco

Afición y juventud en la peña 'Al alma'

Una imagen de la actuación del Wilo en la peña Al Alma.

Una imagen de la actuación del Wilo en la peña Al Alma.

Sábado noche de ambiente taurino, En la plaza torea Morente, y en unos de los bodegones adyacentes a la plaza espera el Wilo. Un ambiente tremendo, con ganas de disfrutar. El Wilo templa la voz y se presenta , agradeciendo la presencia de los artistas que le acompañan y al público, sintiéndose profeta en su tierra. Por copla templá, con prosa del velero y con el velero se bajaron, probando el sonido.

Se decide abrir las puertas del bodegón, para el deleite de los paseantes por la plaza, acertada decisión. El flamenco paraba a los viandantes quedándose y escuchando. El Wilo canta para los socios de adentro y por los de afuera, en recital interpreta con sones de Alegrías de Cádiz, Jesuli le invita al cante, meciendo como olas de mar en su toque, que le invita a cantar. Comienza por alto haciendo el cante viñero y de Santa María suyo, a su voz natural, jugando con los jipíos del cante, altos, medios y bajos, terminando con la estrofa "yo soy el Wilo del Puerto de Santa María". Saltan al unísono las palmas de público entusiasmado y es el comienzo (promete la noche).

En mi opinión, un exceso de palmas y golpes de contratiempos al compás, que tapaban el buen toque de guitarra, que duraría en todo el repertorio del cantaor, terminando las Alegrías con el dominio largo de juego de sus melismas largo significativo del cante por Cádiz.

El joven expresa su gratitud, señalando que no hay más felicidad que cantar en su tierra, dedicando su actuación a su familia y del disco suyo 'Romance'. 'Abuelo', dedicado a su abuelo que no conociera y a todos los marineros que quedaron en la gloria del Carmelo bajo el manto de la mar, finalizando el romance por una solear antigua del Puerto. Anuncia fandango, agradece al dúo de palmeros. El Wilo y Jesuli, la voz y el toque, ahora escucho el buen hacer del cante y el toque, fandangos naturales y valientes. El Wilo sabe el bien escogido de letras suyas, tocando la fibra sentimental, en letras nuevas y actuales, sabiendo hacer el cante. A capela suena el cante más bonito que en la megafonía, esas bóvedas tienen una sonoridad que acompaña el cante provocando los olés y en pies las palmas por bulerías. Con ello se despide en su primera parte finalizando por un amplio repertorio por tangos.

Comienza la segunda parte, que el público aprovecha para refrigerarse y comenta la jornada y felicitaciones del acto. La segunda parte se inicia con uno de los cantes más complejos en su interpretación, gracias al juego y la habilidad de la garganta. El Wilo  creará el estilo y lo moldeará en su interpretación más flamenca. Solea por bulería, que se la dedica Antonio Villar, el maestro  de las seis cuerdas y que tanto hiciera por las academias de bailes de El Puerto y algún que otro coro rociero en su dirección y grupos de flamenco, festeros de cosecha propia. Canta un alegato sobre la historia de Lorca, el poeta del flamenco y del pueblo gitano. Romances y coplas por bulerías entendiendo ese cante hacía una mención por provincia andaluza. De su disco y dedicándose a sus amistades más directas, el tema 'Tristeza' terminando de su repertorio con la más grande, Rocío Jurado, realizando un recorrido coplero. El Público enloquece. Por petición del público efectúa otra tanda de fandangos, terminando con 'Alfileres de Colores'. Si hay algo que sobresale es la afición y juventud de esta nueva peña flamenca que tiene alma como su nombre enuncia, 'Al alma', donde el artista canta e invita a cantar a la afición, subiendo jóvenes aficionados que, mejor o peor, se arrancan por fandangos y el público los jalea, que al cante lo hacen vivo.

Así lo viví, lo presencié, e intento transmitir.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios