“Más que un listado de promesas es un compromiso con el que vamos a abrir puertas a la transformación de la ciudad, en un lugar que nos haga sentir orgullo, alegría y vida; para que Puerto Real se venga arriba”, ha dicho Aurora Salvador, candidata de la  Confluencia de Izquierdas de Puerto Real para la Gente, en la presentación de su programa.

Salvador explica que en el programa municipal destacan 15 propuestas para mejorar la ciudad y que está formado en su totalidad por 199 medidas que “cambiarán el aspecto de la ciudad y el estado de ánimo de la ciudadanía”. No obstante, adelantan que se mantendrá abierto a la participación ciudadana. “No es una simple lista de cosas que hacer, sino otra forma de hacer las cosas”.

En la Confluencia dicen saber por experiencia que los recursos y las capacidades de los ayuntamientos están muy limitados, que hay promesas que son “cartas a la luna” y que al paso por la realidad producen “una enorme decepción”. Por eso, dicen que no pueden prometer más que “trabajo y compromiso”.

Así, adelanta Salvador que  su compromiso se basa en atender a las necesidades materiales de la gente, a la necesidad de las familias de tener techo y energía limpia y asequible, y a lo que nos es común: embellecer las calles, plazas y jardines y darles vida como lugar de encuentro, intercambio y convivencia.

Por su parte, José Alfaro, número dos de la lista de la Confluencia, explica que la intención es “atender a los espacios para la cultura, la convivencia, el deporte y el ocio. Definir y dar prestigio a nuestras instalaciones culturales y convertirlas en centros desde los que la actividad se pueda extender por nuestras barriadas mediante planes integrales”.

Convertir las empresas públicas en referencias de la sostenibilidad y recuperar la voz de los colectivos sociales para la participación ciudadana son también propuestas de un programa diseñado con “amplia participación”, para el que se ha contado con “personas de reconocida valía y experiencia en nuestros debates de Ideas para la ciudad que queremos”, apuntan en la confluencia.

 Por último, detallan que el programa “no es un cofre cerrado sino una puerta abierta a la participación para ir diseñando y construyendo, día a día y paso a paso, la ciudad que queremos”.