La participación de Josete en el partido más importante de su vida, como él mismo lo definía hace sólo unos días, continúa en el aire debido a las molestias que arrastra en su tobillo izquierdo -inflamación de tendones-, que ya le impidieron jugar en el compromiso de ida después de resentirse durante el calentamiento previo al encuentro. El entrenador del Cádiz, Claudio Barragán, se limitaba a decir ayer, sobre el estado físico del central, que "habrá que ver cómo está mañana -en alusión a hoy sábado-". La presencia del ilicitano, por tanto, es a día de hoy una incógnita que quedará despejada mañana poco antes del partido.

El técnico aseguraba que no le preocupa la posible ausencia del capitán porque "hay gente fresca con ganas de participar". El resto de la plantilla -salvo el lesionado Andrés Sánchez, baja de larga duración por fractura de peroné producida justo antes del comienzo de la fase de ascenso- está a disposición del míster en el partido definitivo de la temporada.

Claudio anunciaba ayer que realizará "algún cambio" en la alineación en relación con la que salió hace una semana en San Mamés. Como es lógico, el preparador cadista no ofrecía pistas sobre esas posibles variaciones en el once, aunque comentaba que "se puede cambiar algo en busca de frescura". La confección de la alineación estará pensada también con la idea de disponer efectivos en el banquillo por si son necesarios movimientos para apretar más al rival. "Hay que tener un plan B por si acaso", indicaba el entrenador.

El técnico decía que de antemano no firma alcanzar la prórroga (eso supondría que el Cádiz ganó por 2-0 en los 90 minutos), si bien no ocultaba que "si llegamos al tiempo extra el equipo estará muy motivado". Si hay alargue después del pitido final, el conjunto amarillo apuraría sus opciones de ascenso en los 30 minutos añadidos o quizás en una definitiva tanda de penaltis.

Claudio afirmaba ayer que "creo en la gente que nos quiere", en referencia al "espectacular apoyo de la afición, que llenará el estadio". Mostraba su deseo y esperanza de que "después del partido podamos celebrar una gesta".

La plantilla del Cádiz realiza hoy el último entrenamiento antes del duelo definitivo contra el Athletic de Bilbao B. Serán los últimos retoques para repasar el examen que mañana le espera en el Carranza.

Sin duda, se trata de la prueba más exigente del curso que obliga a los jugadores a hacer un esfuerzo extra para intentar convertir en realidad el objetivo del anhelado ascenso a Segunda División A.