"No soy muy miedica"

Cuando baile sobre el hielo de Sochi mañana y el viernes, Javier Fernández acaparará en España casi tantas miradas como su gran inspiración, Rafael Nadal, pero al patinador artístico no le asusta cargar a sus hombros tanta presión. "No soy muy miedica", señaló el madrileño. "Sólo tengo miedo de que la vida sea muy corta, como dicen. No quiero que sea así", añadió en la villa olímpica de la ciudad bañada por el Mar Negro la gran esperanza del país para volver al podio de unos Juegos de Invierno. Doble campeón de Europa y bronce mundial con 22 años, Fernández aseguró que no teme al renacido Evgeni Plushenko, héroe local.

-¿Qué recuerda de las medallas de los hermanos Francisco y Blanca Fernández Ochoa?

-El estar haciendo un deporte que nadie lo ha hecho a ese nivel y llevarte una medalla olímpica... Es un orgullo incluso mayor. Ojalá yo sea capaz de hacer eso. Lo puedo hacer, pero todavía hay que salir al hielo a patinar bien.

-El ruso Evgeni Plushenko ha sido oro en equipos. ¿Le asusta?

-No, no me da miedo, pero no hay que olvidarse de él porque es un patinador increíble, uno de los que ha hecho historia en este deporte. Yo lo que tengo que hacer es salir a la pista y hacer mi programa. El resto, que haga el suyo.

-¿Y fuera del hielo a qué tiene miedo Javier Fernández?

-A pocas cosas la verdad, no soy muy miedica. ¿Qué me da miedo? La lanzadera del parque de atracciones de Madrid. Subí porque mis amigos me arrastraron. No tengo miedo a muchas cosas. Sólo tengo miedo de que la vida sea muy corta como dicen. No quiero que sea así.

-¿Merece la pena tanto sacrificio y esfuerzo?

-Sí, por supuesto. A veces tienes tus bajones por no estar con la gente que te quiere, pero claro que merece la pena y por eso llevo tanto tiempo viviendo fuera de España. No porque yo quiera personalmente, sino porque lo necesito para mejorar. Quiero ser el mejor patinador que pueda. No merece la pena sólo por mí, sino también por mis padres, que me han visto crecer y mejorar desde que era pequeño.

-¿Qué es lo más duro de vivir en Toronto?

-El no estar con la familia, con los amigos, el muchas veces decir: "Pues ahora mismo me iba a la calle con mis amigos y me tiraba toda la tarde sentado en un banco hablando".

-¿Cuántas veces calcula que se ha caído en el hielo?

-Podría decir que con los años que llevo patinando, 16, calculo que me habré caído un millón de veces. Como no me acuerdo de cuántas veces me caía de pequeño... Últimamente casi no nos caemos. En un determinado nivel te caes a lo mejor una o dos veces en una hora de entrenamiento. Pero si miro para atrás, sé que me he caído muchísimas veces.

-¿Qué deportista lo inspira?

-Rafael Nadal. Por lo que lucha, por como es personalmente... Muy pocas personas pueden llegar a ser cómo es él. Tener la cabeza tan fuerte como la tiene él, controlarlo todo, la cabeza, el control, lo físico...

-¿Por qué le llamaban lagartija cuando era pequeño?

-Porque no paraba nunca. Era muy travieso y siempre me estaban castigando. De pequeño era como una lagartija, que no para quieta. Era un revoltoso

-¿Firmaría ahora mismo una plata?

-No firmo nada antes de que sea la competición. Tengo posibilidades de podio, sí, y voy a pelearlo. Va a ser difícil, sí. Hay muchos patinadores que nunca sabes lo que van a hacer y en cualquier momento te ves primero o el número cinco.