La Isla azulina se alza ante la injusticia: San Fernando se resiste a dejar morir a su equipo
La alcaldesa Patricia Cavada y Monchi intentan aclarar el negro panorama del San Fernando ante 1.500 aficionados
Así anuncia el propietario del San Fernando CD la disolución del club
Es un caso único. Y así debe de ser considerado. La premisa de los que, en estos momentos, luchan a destajo para que el San Fernando CD siga sobreviviendo es la de estar unidos, la de hacer llegar a la Federación Española de Fútbol de que en San Fernando se quiere seguir teniendo fútbol. Y, sobre todo, no dejar que un grupo inversor, por simple capricho, haga desaparecer a una entidad con una solera que data desde aquellos años 40 del siglo pasado y que ha luchado, por estar vivo, contra viento y marea.
En la jornada del viernes se explicó como está la situación, lo que se ha trabajado, a destajo, para poder solucionar el problema y, sobre todo se vio un atisbo de lo que puede ser el futuro del San Fernando que llevará, sin duda alguna, un nombre impreso, Ramón Rodríguez Verdejo ‘Monchi’.
En un principio, la reunión estaba prevista celebrar en el Palacio de Congresos, en pleno centro de la ciudad, pero conforme fue llegando la hora se percibió que el recinto, donde solamente se podían albergar a 250 aficionados se iba a quedar pequeño.
Y así fue, una vez llenada la sala principal del palacio, otrora Cine Almirante, más de las tres cuartas partes de los aficionados se quedaron en la calle y, en un movimiento rápido y eficaz, se trasladó la reunión al auditorio del Parque Almirante Laulhé.
En dicho lugar se dieron cita alrededor de 1.500 aficionados del San Fernando ataviados con las indumentarias azulinas y expectantes de lo que puede ser el futuro más inmediato del club de sus amores. Sin duda alguna, el momento más emotivo fue la llegada de Monchi, acompañado de la alcaldesa, Patricia Cavada, que fueron recibidos con un enorme estruendo de alegría por parte de los aficionados.
Fue Patricia Cavada la que cogió las riendas de la explicación, del dejar a las claras lo que se lleva sufriendo en los dos últimos meses, lo que se ha trabajado para intentar que la nave llegase a puerto, lo que se sigue pensando hacer, y lo hizo de manera cronológica.
La alcaldesa comenzó relatando que, una vez finalizada la competición se pusieron en contacto con Louis Kizinger ante las declaraciones realizadas por éste de su marcha. Rápidamente se subió un peldaño más para poder contactar con el que había sido su jefe, Tarik, y la sorpresa fue monumental cuando se les comunicó que a ambos se le había finiquitado por parte del grupo MTM, dueños de las acciones del equipo azulino.
Fue entonces cuando entró en acción la figura de Monchi que, entre contactos naciones e internacionales, buscó la forma de contactar con los dueños del San Fernando, situación que fue imposible de arreglar.
Sin embargo, si se pudieron poner en contacto -relataba Patricia Cavada- con un grupo de abogados que eran los que tenían en sus manos el destino del San Fernando. La intención de estos abogados, contratados por MTM, no era otra la de liquidar y terminar con los días del San Fernando y fueron los momentos más duro de una negociación que, a día de hoy, persiste.
Tanto Monchi, como la alcaldesa, instaron al grupo propietario del San Fernando a que vendieran el club, porque había inversores dispuestos a la compra, pero la negativa fue la respuesta recibida una y otra vez.
En esa situación se pidió qué aunque la empresa se liquidase, se pudiese negociar la tramitación de la licencia federativa del equipo para que compitiese. A eso si aceptaron los dueños de la entidad.
El siguiente problema radicó en que, tras diversas reuniones con administraciones, empresarios con la Federación Andaluza de Fútbol, incluso el Comité Olímpico y el Consejo Superior de Deporte y todas las entidades habidas y por haber, el último escollo residía en la Federación Española de Fútbol que, según la alcaldesa, afirman que intentan evitar un mercantilismo de las licencias.
Puestos en contactos con el Consejo Superior de Deportes e, incluso, con el Ministerio de Deportes, se le dio el visto bueno a la tramitación de la licencia, tal y como quedaba reflejado en un documento que la propia alcaldesa expuso ante los aficionados.
Pero a día de hoy, continúa la negativa de la Federación Española de Fútbol. La alcaldesa señalaba que “estamos buscando el amparo del fútbol español, y en especial de la FEF. Estamos buscando la defensa de los organismos deportivos del país, porque el San Fernando arrastra a muchos aficionados y es un sentimiento que no se puede perder por el capricho de un grupo de inversión que llegan al país para hacer negocio”.
Cavada terminó señalando que el viernes llegó otro comunicado donde los abogados de MTM habían remitido un comunicado a la Federación donde afirman que no participarán en competición el año que viene, otra piedra en el camino.
MONCHI EN EL FUTURO ISLEÑO
Fue Monchi el siguiente en coger el micrófono, en dirigirse a los aficionados, en dejar a las claras que la intención, su intención, es la de no dejar al San Fernando en un dique seco. El director deportivo del Aston Villa, tremendamente emocionado, explicó los dos duros meses de trabajo que lleva, codo con codo, con la alcaldesa porque “vengo como canterano, aficionado, seguidor, socio y accionista de mi club” manifestó ante una gran salva de aplausos.
Monchi dejó a las claras que San Fernando seguirá teniendo fútbol, desde donde sea, pero que hace falta la ayuda de todos los aficionados para hacerse oír, porque no es justo que un club como el azulino se pierda injustamente. Igualmente sentenció que se está “preparado para que, cuando la federación acepte lo que la lógica dice, en un tema con tanto sentimiento, se ponga todo manos a la obra en un proyecto deportivo muy ilusionando en el que lleva mucho tiempo trabajando para que el San Fernando siga compitiendo al máximo nivel”.
El problema más grave es el tiempo que apremia aunque “estamos intentando una moratoria para los plazos de inscripción, plazos que son normales, pero esto no lo es, esto es nuevo y no podemos esperar que en un plazo de tiempo saquen una norma para evitar este problema y a nosotros ya no nos afecte porque esto es un problema de hoy”.
Lo que si está claro es que para que se tramite la licencia tiene que haber un receptor y ese sería el nuevo San Fernando del que se espera que esté en la categoría superior más alta que se pueda.
Con la petición de ayuda a los aficionados, la recogida de firmas, y el compromiso de muchas almas, se cerró un acto que, sin duda alguna, tendrá un antes y un después porque lo que quedó tremendamente claro es que el San Fernando sigue vivo y que se alzó ante la injusticia de no tener fútbol este año.
También te puede interesar