La Real Balompédica Linense, que ha sumado siete de los últimos nueve puntos por los que ha litigado, comienza hoy su sprint final de Liga, preñado de encuentros de la máxima dificultad. Esta tarde (18:00) en Mérida se encuentra con el rival más en forma del grupo, en uno de esos partidos en los que da la sensación de que el equipo de La Línea tiene poco que perder y mucho, muchísimo que ganar, por cuanto un triunfo le colocaría a la misma orilla del objetivo de la salvación. Bauti y Álex Rubio entran en el once inicial en lugar de Rafa Navarro y Francis Ferrón. Los de La Línea se desplazan hoy con los 19 jugadores disponibles.

Una Balona venida a más somete hoy a examen su cacareada debilidad en los desplazamientos. Un solo triunfo a domicilio desde que comenzó la temporada -de eso hace ya casi seis meses- demuestra que a los albinegros no les va nada bien eso de ponerse en ruta. Por algo son el tercero peor en ese apartado. Dos puntos de los últimos quince posibles y sólo dos goles en esos cinco partidos como visitante demuestran que no encuentra solución para un mal que ya se prolonga varias campañas.

Con todo, la Balompédica pretende hacer valer su buen momento, en el que ha puesto de manifiesto en las tres últimas jornasdas, para acercarse un poco más a esos 44-45 puntos que todo el mundo entiende que suponen la garantía de la salvación. Seis-siete puntos le separan de esa meta, una cantidad que no se antoja especialmente inalcanzable con siete jornadas por disputarse, pero que se atraganta un poco más si se valora el nivel de la mayor parte de los rivales que le esperan de aquí a final de la fase regular.

Los únicos dos que se sabe de antemano que no serán de la partida son Olmo, al que una fractura en un pie descarta para lo que resta de temporada y Rafa Navarro, que está cedido por el propio Mérida con el compromiso de no enfrentarse a su equipo de procedencia.