El Málaga, con un gol en el tiempo de prolongación del joven canterano Samuel, logró un triunfo importantísimo por 3-2 ante un Betis que apuró sus opciones a balón parado pero que no supo guardar el resultado ni matar el encuentro pese a disponer de varias ocasiones claras para llevarse la victoria.

Rompió las estadísticas el delantero paraguayo, ex jugador del Betis, Roque Santa Cruz, que aprovechó un centro por la izquierda de Eliseu, que remató una vez de cabeza y un segundo remate, también de cabeza, por la pasividad de la defensa verdiblanca, que se coló a la derecha de Andersen.

El Málaga, que llevaba cinco partidos sin ganar y cuatro sin marcar, se animó, comenzó a mandar y a intentar jugar con velocidad por las bandas, con alguna llegada al área contraria. El Betis, en treinta minutos no se había acercado a la portería malaguista. El guardameta Willy Caballero, que no cuenta para el seleccionador argentino Alejandro Sabella, no había intervenido. Era un espectador más.

Y en el primer acercamiento del Betis, Sergio Sánchez le hizo una falta innecesaria a Vadillo en la frontal del área, y Verdú, con un lanzamiento a la escuadra, igualó el encuentro en el minuto 32. El Málaga no se esperaba este golpe y volvió a ser ese equipo ramplón, lento y sin ritmo. Lo mejor, el descanso.

Lo peor de la segunda parte fue la lesión del central polaco del Betis Damien Perquis, que recibió un cabezazo en el salto con el malaguista Fabrice, y tuvo que ser evacuado del campo en ambulancia y llevado a un hospital de la ciudad malagueña. El público, expectante por lo ocurrido, le tributó una ovación al jugador del Betis cuando se fue.

El Málaga, a excepción de unos primeros instantes explosivos, volvió a caer en la rutina, e incluso el Betis, en una acción por la derecha de Vadillo, pudo adelantar a su equipo, pero su lanzamiento, solo, lo despejó a córner Caballero. En la siguiente jugada, Eliseu aprovechó un pase de Portillo para, con un disparo ajustado al poste derecho, conseguir adelantar nuevamente a su equipo en el minuto 60.

Lo más difícil lo había hecho el Málaga, pero otra vez volvió a fallar a balón parado, en una acción de estrategia. Una falta por la izquierda la remató de cabeza el central Jordi Figueras para igualar otra vez el encuentro en el minuto 62. Otro golpe duro para un equipo frágil en lo anímico, después de adelantarse por dos veces en el marcador.

El Málaga, roto, partido, romo en ataque ante un Betis que a la contra, con un veloz Vadillo, creaba peligro constantemente. Incluso pudo haber un penalti de Sergio Sánchez al propio Vadillo, que el árbitro no creyó conveniente señalizar.

El encuentro, falto de calidad, entró en una vorágine de ataques descontrolados por parte de los dos equipos. El delantero del Málaga Juanmi, que entró en el campo en sustitución de Santa Cruz, tuvo el tercer gol, pero su disparo lo adivinó Andersen. El Betis insistía, algo más entonado, pero algo alocado.

El enfrentamiento moría en la locura con seis minutos de prolongación. Y los aprovechó el Málaga para llevarse el choque con un tanto de Samu.

Málaga: Caballero; Gámez, Sergio Sánchez, Weligton, Antunes; Fabrice (Anderson, 63'), Darder, Tissone (Samuel, 80'), Eliseu; Portillo y Santa Cruz (Juanmi, 75'). Betis: Anderson; Juanfran, Perquis (Caro, 54'), Figueras, Nacho; Vadillo (Cedrick, 80'), Xavi Torres, Nono, Juan Carlos (Steinhöfer, 65'); Verdú y Jorge Molina. Goles: 1-0 (13') Santa Cruz. 1-1 (33') Verdú. 2-1 (61') Eliseu. 2-2 (63') Jordi Figueras. 3-2 (94') Samu. Árbitro: Undiano Mallenco (navarro). Mostró tarjeta amarilla al malaguista Antunes y a los futbolistas del Betis Juan Carlos y Nono. Incidencias: Partido correspondiente a la duodécima jornada de Liga disputado en La Rosaleda ante 28.000 personas.