La parroquia de la Santísima Trinidad volvió a ser en la jornada de ayer el lugar en el que se celebró uno de los actos con más tradición y arraigo de la localidad cuando llega la Feria.

Un año más, y van 15, Manolita Fernández cumplió con su compromiso de "propagar la voz de San Antonio" a través del acto de reparto de panecillos del Santo, un encuentro al que cada año acude un mayor número de fieles para conseguir un pan que, según la organizadora del encuentro, "ayuda al que tiene fe en San Antonio".

En esta ocasión fueron unos 3.000 los panecillos que se repartieron entre los cientos de feligreses que se dieron cita en dicho templo, y que se afanaron por conseguir algunos panecillos tras la eucaristía dedicada al Santo.

En dicho encuentro estuvieron presentes algunos de los miembros del nuevo equipo de gobierno, como el alcalde, Ernesto Marín, o el delegado de Fiestas, Agustín Díaz, entre otros.

Asimismo, miembros de Protección Civil estuvieron presentes en un acto en el que cada año se hace más necesaria la organización de alguna fórmula ordenada para el reparto de los panecillos y así evitar los tumultos y el desconcierto que se genera a veces por el afán de conseguir el ansiado panecillo.