En cuestión de horas se debe conocer de una vez por todas el nombre del entrenador que ocupará el banquillo del Cádiz la próxima campaña... y ya está tardando. Parece que la margarita que los mandatarios del club gaditano han ido deshojando en los últimos días se ha quedado finalmente con tres pétalos, y uno de ellos está casi descolgado.

Esos dos que aún se mantienen firmes son los de Hristo Vidakovic y David Amaral, tándem del que se prevé que en la jornada de hoy salga el técnico amarillo; el que está a punto de precipitarse al vacío no es otro que el de David Vidal, que una vez más se quedará a las puertas de retornar al Ramón de Carranza a no ser que a última hora rebaje considerablemente sus pretensiones económicas.

Así las cosas, parece que el dúo Amaral-Vidakovic será el que se dispute la dirección de la plantilla gaditana. El club se ha cubierto las espaldas y las negociaciones están bastante avanzadas con ambos candidatos, de forma que, si fallara la opción prioritaria de las dos que maneja el Cádiz, la segunda baza estaría a tan sólo un toque de teléfono para que la operación se cerrase casi de inmediato. Asimismo, mucho está teniendo que ver con esta demora en la confirmación del entrenador la composición del resto del cuerpo técnico que llegaría con esa opción prioritaria.

No obstante, todo apunta a que esos flecos pendientes en las negociaciones se resolverán, para bien o para mal, a lo largo de la jornada de hoy.

Durante la intensa jornada de indagaciones que este medio llevó a cabo ayer, no fue posible contactar con un David Amaral que podría recalar en el Ramón de Carranza después de haber dirigido a un amplio ramillete de equipos en Segunda y Segunda B entre los que se encuentran Castellón, Salamanca, Ponferradina, Cartagena, Tenerife (en dos etapas), Las Palmas, Lanzarote y Universidad Las Palmas. Más suerte hubo a la hora de hablar con Vidakovic, que aseguraba que se mantenía a la espera de la llamada del Cádiz. "La propuesta ya está hecha y el Cádiz es el que tiene que decidir. Estaría encantadísimo de entrenar allí. Supone un reto importante para mí porque considero al Cádiz un grande, por afición y por historia", aseguraba el ex técnico del Écija Balompié.