Atención. Peligro de posible desprendimiento. El Cádiz viaja en este inicio liguero a velocidad de crucero, pero hoy se topa en su camino con una señal de advertencia que le obligará a tener los ojos muy abiertos si no quiere levantar de golpe el pie del acelerador y asumir sus dolorosas consecuencias. El Betis B, dirigido desde el banquillo por un viejo conocido como es Oli, visita el Ramón de Carranza sin nada que perder y con mucho que ganar. Los verdiblancos, como equipo filial, son sinónimo de rival impredecible. Y sus jugadores, locos por llamar a la puerta del primer equipo, pisarán un escenario en el que siempre hay depositada alguna que otra mirada y en el que desearán gustarse y gustar, gustar y gustarse… sin un orden claro de prioridad. La piedra de toque que se le presenta a los amarillos es, pues, de un tamaño desconocido. Y se asoma a la vuelta de la esquina: a partir de las ocho y media de la tarde obligará a los pupilos de Risto Vidakovic a estar más que atentos a la hora de conducir el balón, algo que harán con la afición como copiloto.

Hasta la palabra invicto tiene peros. El Cádiz, líder del grupo IV de Segunda División B, está saldando sus partidos a domicilio con la solvencia que le está faltando cuando salta a jugar sobre el verde del Ramón de Carranza. "Me molesta que vayamos primeros, no hayamos perdido ningún partido y estemos recibiendo palos. Cuando venga la época mala donde no se ganan partido no quiero ni pensarlo, porque nos tendremos que poner una armadura", escupía Enrique esta semana con la objetividad de los buenos resultados como el mejor argumento y siguiendo la estela de queja marcada por Risto Vidakovic horas antes.

Y es que los cadistas no saben lo que es perder tras seis jornadas disputadas y sólo han cedido un empate ante el Murcia, en casa. La última victoria, lograda en Estepona por cero goles a dos, mejoró la conducta de un equipo que pocos días antes había sufrido de lo lindo para ganar por la mínima al Yeclano en el Ramón de Carranza. El camino no siempre te avisa de un posible desprendimiento, pero si se echa la vista atrás hay que aprender de los errores y de la experiencia. Y ante el Betis B habrá que salir a jugar con la intensidad y la concentración que, en menor o mayor medida, les viene faltando a los futbolistas del Cádiz durante este curso liguero en momentos determinados.

Risto Vidakovic no variará el último equipo titular que logró tres nuevos puntos en la costa del Sol y la única novedad llegaría en la zona atacante. Pachón fue titular el pasado domingo en detrimento de Enrique, lesionado entonces, pero el extremeño vuelve a estar disponible para el entrenador serbio y está por ver quién se sentará en el banquillo de inicio. También Velasco tiene papeletas para ser el sacrificado y dejar así su lugar en la banda derecha a Enrique, aunque el cordobés no debería ver cortada su buena proyección.

Pueden aparecer dos rivales; uno que salga con desparpajo a jugar al fútbol y otro que prefiera verlas venir y que confíe su peligro en las jugadas a balón parado o en una contra que pueda ser letal.