El 26 de septiembre de 2022 se cumple exactamente un año de un hecho que causó revuelo mediático y a nivel interno en el Cádiz CF.

Hace un año, el conjunto amarillo perdió 3-1 en el campo del Rayo Vallecano con una mala actuación en la que fue superado con claridad por el cuadro local.

La noticia no fue la derrota en sí, que formaba parte de la competición, sino lo que sucedió horas después fuera del terreno de juego.

Tras el varapalo sufrido ante un recién ascendido con una pésima imagen, varios futbolistas del Cádiz CF salieron por la noche en la capital de España. Las imágenes en una discoteca madrileña se extendieron con rapidez por las redes sociales. La derrota, el pésimo encuentro y la fiesta conformaron un cóctel explosivo.

El club y el entonces entrenador, Álvaro Cervera, no fueron de la mano en un asunto delicado. La entidad cadista impuso una sanción económica a los protagonistas de la salida nocturna. El técnico, como responsable del vestuario, tomó su propia decisión y apartó a esos jugadores en el siguiente partido de Liga contra el Valencia disputado en el estadio Nuevo Mirandilla.

La decisión de Cervera de dejar fuera de la convocatoria a esos futbolistas provocó una fortísima discusión entre el presidente, Manuel Vizcaíno, y el propio técnico en la zona de vestuarios minutos antes de aquel encuentro ante el conjunto che, que se acabaría resolviendo con empate sin goles.

El preparador cadista tomó una medida ejemplarizante con la que no estaba de acuerdo el presidente, que entendía que era suficiente con un castigo de carácter económico para no mermar el potencial deportivo del equipo.

La cuestión es que aquel episodio madrileño fue considerado a la postre por Cervera como el principio del fin de su estancia en el banquillo del Cádiz CF.

El entrenador fue despedido tres meses y medio después debido a la deficiente marcha del equipo, ubicado en zona de descenso y con sólo 14 puntos al inicio de la segunda vuelta, con toda la pinta de dar con sus huesos en Segunda.

Los últimos meses de Cervera fueron de absoluto desgaste tras más de cinco años de éxitos (dos ascensos, una permanencia en Primera, récord de partidos y triunfos...). Distanciamiento con el presidente y con parte de la plantilla. Y malos resultados en la Liga. Nula relación con algunos jugadores y situaciones tensas en el día a día. El técnico llegó a suspender algún entrenamiento al considerar que los futbolistas no se estaban empleando a fondo.

En su despedida en enero de 2022, Cervera no mencionó al presidente y apenas citó el nombre de algún jugador. El deterioro era evidente y tras su destitución aterrizó Sergio González.