El Cádiz afronta con toda la ilusión del mundo el encuentro de vuelta contra el Hércules, aseguraba ayer el entrenador, Claudio Barragán, en la rueda de prensa previa que ofreció en el estadio Ramón de Carranza. El técnico explicaba que el trabajo de preparación a lo largo de la semana se ha centrado "en el aspecto psicológico y también en corregir lo que nos pasa en los últimos partidos". Y es que "los pocos errores que hemos cometidos nos están pasando factura", recalcaba Claudio mientras subrayaba la que puede ser la clave del choque contra el conjunto alicantino. "Es importante que seamos contundentes en las dos áreas, eso es lo que nos falta".

El valenciano comentaba que en el duelo de ida "recibimos dos goles en apenas dos minutos que no dejaron medio noqueados y la respuesta fue la de un equipo atrevido, sin miedo, sin prisas". La versión que ofreció la escuadra amarilla desde el 2-0 en contra en el estadio Rico Pérez es la quiere ver mañana el míster sobre el tapete del santuario cadista. "El espejo en el que mirarse es la última media hora de Alicante. Ahora tenemos un partido para saber interpretarlo de la mejor manera posible. Se trata de marcar y no recibir un solo gol".

No ocultaba el entrenador del conjunto gaditano que será un partido difícil ante un buen rival. Recordaba que, tras el 1-1 conseguido en Oviedo, "también era optimista, aunque sabía que lo que iba a mandar eran los detalles, al igual que en Alicante, donde nos faltó elegir bien el último pase".

Pese a la derrota por 2-1, Claudio señalaba que el equipo "hizo muchas cosas buenas". De hecho, indicaba que "el tramo final de partido que hicimos me da tranquilidad dentro de la dificultad que tiene la eliminatoria".

No dudaba el preparador cadista en otorgar al Hércules el papel de favorito. La semana pasada, antes del duelo de ida, era el técnico del cuadro alicantino, Manolo Herrero, el que imponía ese rol al Cádiz, pero tras el primer envite Claudio tiene su propia opinión. "El Hércules es el favorito porque va con ventaja en el marcador, aunque se trata de un resultado que se puede superar. Tenemos que poner los cinco sentidos en el partido y no conceder lo más mínimo. Y confiar en nuestras posibilidades".

Un equipo dirigido por Claudio -la Ponferradina- ya eliminó a otro entrenado por Manolo Herrero -el Jaén- con idéntico resultado de 2-1 en la ida. No piensa el técnico del Cádiz que eso tenga influencia porque "cada partido es una historia. Aquí hay más presión mediática que en Ponferrada por la historia. Allí no había esa necesidad imperiosa de ascender. Lo de ahora no tiene nada que ver".

"Llevamos todo el año siendo favoritos en los partidos de Liga, hemos sido capaces de superar adversidades y ahora tenemos que hacerlo. El tren no vuelve a pasar dos veces y hay que salir con todo", apuntaba el de Manises mientras insistía en al perfila complicado del Hércules. "Es un rival fiable fuera de casa, no será nada fácil. Tenemos que ser intensos y estar tranquilos con el balón, ser precisos".

La referencia del choque de vuelta contra el Oviedo está presente para no repetir los errores. Claudio explicaba que "ese día nos equivocamos en la segunda parte, queríamos llegar pronto y eso nos perjudicó. No podemos intentar hacer cosas que no hemos trabajado".

El de mañana será un partido de alta tensión porque es como una final. Para el míster, "la clave está en la mente". Y es que, a su juicio, en todos los partidos de este calado "se nota que hay tensión por todo lo que hay en juego. Espero que demos nuestra mejor versión".

En su opinión, la mejor manera de encarar mañana el encuentro ante el Hércules es "como un partido de Liga, tomar el camino que nos hizo ser campeones".

Como es lógico, Claudio no ofrecía la más mínima pista sobre la alineación, pero sí afirmaba que "todos los jugadores tienen que estar preparados". Si de él dependiera, la convocatoria sería más numerosa: "No entiendo por qué no es posible llevar 18 jugadores en el play-off de ascenso, pero hay que adaptarse a lo que hay". Señalaba que Migue García "estuvo bien" cuando salió en Alicante y de Navarrete indicaba que "siempre aporta cosas positivas".

Claudio no perdía el hilo conductor de su comparecencia y terminaba con el mismo mensaje que no se cansaba de transmitir: "Quiero que el domingo cada uno dé su mejor versión, si aparecen todos seguramente nos irá bien". El entrenador aseguraba que esta semana "ha sido diferente de trabajo, tenemos la sensación de la última media hora del Rico Pérez, es en la que hay que mirarse".