Hay que remontarse a 1928. El Español de Cádiz pasa a la historia quedando su periplo en un cajón y es el Mirandilla (la Sociedad Cultural y Deportiva) el que da el salto al primer peldaño del balompié gaditano. Con el respaldo del colegio lasaliano San Miguel Arcángel, la difícil historia de este equipo empieza a escribirse.

Un camino muy complejo el que le tocaba al club capitalino porque la afición, en una gran mayoría, le daba la espalda e incluso se alegraba si se producían resultados adversos. A las puertas de la II República, un conjunto que detrás contaba con el beneplácito del clero no era bien visto. La desesperación de los dirigentes del ya denominado entonces como Mirandilla FC era tal que se llegaron a jugar partidos no oficiales contra adversarios de enorme rivalidad con la parte más futbolera de la ciudad de Cádiz. Todo ello para que la masa social despertara y apoyara a un Mirandilla FC que lo tenía casi todo menos la afición.

A pesar de las piedras en el camino, en 1935 el 'equipo de los curas', como se le identificaba en la capital gaditana, logra un milagroso ascenso a Segunda División -categoría que en aquella época contaba con varios grupos- y despierta el aficionado que hasta entonces no mostraba especial simpatía con el proyecto.

La Liga 1935/36 no se presenta de forma favorable porque las sensaciones del Mirandilla FC en lo que hoy conocemos como la pretemporada fueron malas. Cuando la competición oficial arrancó se confirmaron los peores presagios y el equipo se fue desfondando hasta perder la categoría. Todo ello con el club en manos de una Gestora, por lo que las dificultades estaban dentro y fuera del terreno de juego.

A partir de esa pérdida de categoría, con el que había sido el primer equipo de la ciudad deambulando de nuevo por las catacumbas del balompié regional, en los mentideros gaditanos se reactiva el debate del cambio de nombre del equipo. Y es que hace 85 años ya se lanzaban los trastos a la cabeza con las denominaciones. La lucha era fuerte entre los conservadores del club Mirandilla FC y los que presionaban por otro nombre. A tanto llegó el asunto que una encuesta elaborada por La Información, periódico de la época, publicó el resultado con el 36% de los votos a favor del nombre Cádiz FC. Esta denominación superó a otras como Gimnástica de Cádiz, Racing de Cádiz o Athletic de Cádiz.

La tensión en ese mes de junio de 1936 fue en aumento por, al fin y al cabo, un equipo de fútbol. Todo ello desemboca en una asamblea extraordinaria en la que los socios ponen sobre la mesa unir las fuerzas futbolísticas de la ciudad bajo el nombre Cádiz FC. Esta medida buscaba una mayor identificación de los aficionados y que el número de socios se elevara a la necesidad de volver a pelear un ascenso a Segunda División.

Finalmente ya en la madrugada del 25 de junio de 1936, una de las asambleas más importantes en la historia del balompié local aprueba que el Mirandilla FC pase a llamarse Cádiz FC. Entre las diversas condiciones del histórico acuerdo aparece que se mantengan los colores del equipo.

De nuevo una votación abrió la puerta a un cambio reclamado por muchos, aunque aprobado luego en asamblea. Desgraciadamente la guerra civil marcó el devenir del primer equipo de la ciudad bajo esta denominación, ya que las competiciones quedaron suspendidas. Una vez que todos habían sido capaces de caminar de la mano, motivos políticos aparcaron el sueño de aquel Cádiz FC. Resulta curioso que hace 85 años se renunció al nombre de Mirandilla que a partir de ahora es la nueva denominación del antiguo estadio Ramón de Carranza.