El Cádiz CF se halla en una situación bastante complicada en el arranque de la temporada 2022/23, que está siendo el peor posible una vez disputadas cinco jornadas de Liga en las que el equipo ha mostrado un nivel bajo.

El conjunto amarillo sólo acumula derrotas (un répoquer de varapalos), no ha marcado un solo gol en 450 minutos de juego y además es el que más tantos recibe (lleva 14 en contra). El escenario empieza a ponerse complicado salvo una reacción inmediata en Valladolid el próximo viernes 16 de septiembre en el duelo encuadrado dentro del sexto capítulo del campeonato.

Las pobres cifras conducen al Cádiz CF a la ubicación en la última plaza de la clasificación y colocan al entrenador, Sergio González, en una tesitura nada sencilla.

El mundo del fútbol está montado de tal forma que el puesto más débil suele ser el del técnico, habitual pagano cuando las cosas van mal. Dependen de los resultados. Sergio González vive su momento más difícil desde su aterrizaje de urgencia el pasado mes de enero.

El actual inquilino del banquillo se convirtió en uno de los héroes de la permanencia conseguida la pasada campaña 2021/22 cuando rescató a un equipo hundido en el pozo y lo llevó a sumar 25 puntos en 18 partidos de la segunda vuelta que contribuyeron de manera decisiva a abrazar la salvación.

Sergio González dio con la tecla entonces, pero ahora el equipo, con la base del último curso, anda atascado en busca de una solución urgente.

El catalán sufre una de las etapas más complicadas desde que ejerce de la profesión de entrenador. Es la primera vez en su carrera como técnico que encadena cinco derrotas consecutivas. Nunca la había pasado lo que está viviendo ahora en la entidad cadista. Los numerosos movimientos que está haciendo en el once no acaban de dar resultado a la espera de los próximos encuentros.

El tope de derrotas seguidas del 'míster' estaba fijado en cuatro en dos campañas en el Valladolid (ambas en Primera División): la 2018/19 y la 2020/21. En la primera de ellas alcanzó su récord de partidos seguidos ganados en la élite, también cuatro.

Sergio González trabaja con sus ayudantes y los jugadores con el reto de cambiar la tendencia y hacer que el Cádiz CF remonte el vuelo. Hay tiempo pero todos en el vestuario son conscientes de que tienen que empezar a sumar sin más retraso.