Cádiz CF

El Cádiz CF recupera sensaciones y gol

  • Victoria sobre la Balona (0-2), con tantos de Chapela y Osmajic, en el debut de Alarcón

  • La aportación del montenegrino y la lesión de Choco, lo mejor y lo peor en La Línea

Alcalá se eleva más que nadie para conectar con el balón en un ataque.

Alcalá se eleva más que nadie para conectar con el balón en un ataque. / CÁDIZ CF

El Cádiz CF  se ha impuesto 0-2 en el Municipal de La Línea, en su tercer partido de la pretemporada que en esta ocasión le midió a la Balona, equipo de Primera RFEF. Los amarillos llevaron una trayectoria de menos a más hasta el ecuador del duelo y, sobre todo, en la segunda mitad. Aunque, sin duda, la peor noticia fue la lesión de Choco Lozano, que al salir a la contra a por un balón se paró en un claro gesto de lesión muscular. Tuvo que se reemplazado.

Álvaro Cervera optó en la primera parte por un once con mezcla de profesionales y canteranos, ya que de estos últimos estuvieron de inicio en el verde linense Juan Flere y Gudelj, uniéndose posteriormente Chapela al suplir al lesionado Lozano. La Balona dejó sensaciones más positivas en la habitual fase de tanteo, ya que apenas se veía en momentos de apuros a pesar de tener enfrente a un equipo de la máxima categoría. A pesar de esa carta de presentación el cuadro capitalino gozó de la primera ocasión en un buen robo de Nano Mesa que entregó un mano a mano a Negredo, quien superó al portero pero no pudo hacer lo mismo con Masllorens, que sacó de cabeza casi sobre la línea de gol.

La realidad es que a través de jugadas trenzadas a los amarillos les costaba tener el potencial que cabe esperar en un encuentro con dos categorías de diferencia, pero no era así en el balón parado sobre todo en los saques de esquina a cargo de Gudelj. El zaguero del Cádiz B tiene un guante en la pierna izquierda que aprovechó Alcalá para ganar la batalla a todos y conectar con un balón que se escapó por encima del larguero.

La primera parte entró en una fase en la que la presión cadista descendió al tiempo que la Balona dio un paso al frente en busca de mayor posesión y presencia en el terreno de su rival. Todo ello frenado en seco por la lesión de Choco, que se 'rompió' en un avance próximo a la banda izquierda y se vio obligado a pedir el cambio.

Cuando el primer periodo encaraba la recta final, el Cádiz CF sacó mayor dosis de ganas y de calidad. José Mari probó suerte en un tiro secó que despejó Nacho Miras, y luego el portero ganó un mano a mano a Nano Mesa -en fuera de juego- tras un pase de diez de Negredo entre los centrales.

Tras el descanso, el carrusel de cambios acompañó como es habitual a estos partidos. Cervera hizo cuatro de una tacada, destacando el debut de Tomás Alarcón, añadiendo minutos después dos más. La Balona repitió casi el mismo guión para refrescar su once.

Mayor diferencia entre unos y otros en la segunda parte. El Cádiz CF fue capaz de imponer buenas maneras y de mandar en el césped del Municipal. Al contrario de la primera mitad, ahora lo hizo con juego y criterio. Osmajic fue una pesadilla para los linenses con arrancadas llenas de fuerza y verticalidad, y ocasiones, tal y como hizo en la acción del 0-1. El montenegrino se cruzó medio campo y en la línea de fondo centró atrás para que Chapela cabeceara al fondo de la red.

Y en la fase de ko balono, otra vez Osmajic dio la de cal escapándose de todos y fallando en la definición sin quitar méritos a la intervención de Mateusz Kania. También Alcalá trataba de mejorar la imagen de El Palmar y se sumaba al ataque con una oportunidad que salvó el portero.

Álex caía a la derecha, más próximo a la defensa que al centro, y Bastida se entendía con el debutante Alarcón a la hora de repartir y oxigenar. Todo ello con Osmajc pasando como el AVE entre Malbasic y Álvaro Giménez, que se enteraban poco de la 'película'. En líneas generales otra alegría, ritmo, llegada y, por supuesto, puntería respecto a lo sucedido en Sanlúcar, de ahí al triunfo. En el penúltimo suspiro el montenegrino encontró el premio a su gran labor 'pinchando' un balón largo con una pierna y mandándolo a la red con la otra. El pase genial llevó la rúbrica de Alarcón. Era el 0-2 que cerraba el tercer amistoso.

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