Detrás de cada fichaje suele haber una historia que mezcla aspectos curiosos y llamativos que han marcado una operación que desemboca en el cambio de un jugador de un equipo a otro. 

Las presentaciones de los nuevos futbolistas son citas que, habitualmente, tienen los guiones cerrados; los protagonistas dicen casi siempre lo mismo               -Gorka Santamaría fue el martes la excepción al hablar de Güiza y Ortuño- y apenas aportan aspectos que informativamente sean llamativos. Ayer lo novedoso llegó con Rafidine Abdullah, un fichaje que no habla castellano -fue distinto escucharle en su lengua natal- y que esconde años de seguimiento por parte del actual director deportivo del Cádiz.

Juan Carlos Cordero hablaba ayer de forma diferente a la hora de referirse al centrocampista galo. Verle de amarillo era algo más que un reto para el murciano. Nada menos que cuatro años ha estado Cordero siguiendo la pista a Abdullah desde que, con 18 años, jugaba en el Olympique de Marsella. Cuatro temporadas en las que ha visto su evolución por las categorías inferiores de la selección francesa. Cuatro campañas en las que ha tratado de hacerse con un hueco y un nombre en el Lorient.

Abdullah es una apuesta ‘made in’ Pina-Cordero, que tiene tras de sí años de seguimiento desde que ambos dirigían con éxito al Granada. El equipo de scouting del club nazarí tenía al día a Cordero de cada paso que daba este centrocampista de corte defensivo, y el cambio de club del ahora director deportivo no ha sido óbice para entonar aquello de ‘no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy’.

“Es un futbolista que es conocido en Francia por haber sido internacional en categorías inferiores. Lo habíamos visto en vídeo y también en directo en su propia liga. Se trata de un futbolista en el que había muchas esperanzas. Aquí tiene la oportunidad de crecer y es un gran complemento para lo que tenemos en la plantilla”, recalcaba Cordero.

El protagonista habló poco y en francés, que traducido resulta: “Estoy muy contento de la oportunidad que voy a tener en el Cádiz. Soy joven y me queda mucho por aprender. Espero que la adaptación sea inmediata para poder jugar el Trofeo Carranza”.

La mañana de ayer no sólo fue acaparada por Abdullah, ya que otros dos fichajes realizaron su puesta de largo: el portero Jesús Fernández y el lateral izquierdo Luis Ruiz. Cordero dejó algunas pinceladas de ambos. “Jesús es un portero experto en el fútbol que firma por dos temporadas. Consideramos que la campaña es larga con la Liga y la Copa, y hemos reforzado bien el puesto. Luis Ruiz es un lateral que sigue en progresión y que es de futuro. Puede ser un jugador importante”.

El nuevo cancerbero se mostró “contento” de estar en el club, al que llega “con mucha ilusión y ganas de trabajar”. “Quiero sentirme realizado como jugador”. Jesús sabe lo que supone Carranza, donde ya ha jugado. “Sé de la exigencia de aquí; lo vi cuando vine con el Castilla (play-off de la 2001-12). Venimos a hacer nuestro trabajo y sabemos que la afición exigirá, por lo que debemos ayudar al máximo al equipo”, aclaró.

Por su parte, Luis Ruiz reconoció que cuando supo de la llamada del Cádiz “no me lo pensé” porque entiende que viene “a un gran club”. “Quiero adaptarme cuanto antes a lo que pretende el míster, que desea que guarde bien la posición y que sea contundente y ofensivo”, añadiendo sobre la plantilla que se ha encontrado que “está bastante compensada y en los entrenos el nivel es alto y la gente va al máximo”.