Partiendo de la base de que la apuesta por el juego de toque está cada vez más asimilada por la plantilla del Cádiz, las dos citas del Trofeo Carranza reflejan que el proyecto de Vidakovic está todavía en una fase verde. Analizando cada línea del equipo, la defensa y el ataque son las que por distintas circunstancias están mostrando más problemas. A falta de dos o tres fichajes, el Cádiz tiene mucho que trabajar para llegar con mayores garantías al estreno liguero.

El Carranza'2010 se fue con un problema serio de seguridad en la defensa y otro preocupante de falta de referente en el ataque. Empezando por la zaga, la llegada de Baquero no termina de dar la suficiente fortaleza a esta línea. Álvaro Silva, salvo que mejore su rendimiento y su compromiso, y no trate de borrarse como hizo en la primera semifinal, no es por ahora una garantía para soñar con una zaga potente. Junto a estos dos jugadores se encuentran Germán y Rubén Díaz. El isleño llega para quedarse pero ha tenido altibajos y debe contemporizar mejor su labor en ese puesto para sacar a relucir sus virtudes. El paternero, por su parte, ha ido de menos a más y da la sensación de que con partidos puede ser un recambio serio para esa demarcación. No hay que olvidar que es el más inexperto de todos.

Los laterales ofrecen carencia en la izquierda -más aún con la lesión de Raúl López-, donde a Tiri le está costando hacerse notar. En la derecha, Pecci es una seria alternativa.

En cuanto a la delantera, la falta de un referente ha marcado las dos citas del Carranza y los amistosos anteriores. Arriaga y Hugo García no se han destapado todavía como los arietes que necesita un equipo que busca el ascenso. Con Toedtli prácticamente descartado, el director deportivo, Roberto Suárez, busca uno o dos jugadores para esa posición ya que las citas ante el Atlético de Madrid y el Espanyol han generado muchas dudas.

El centro del campo es la demarcación que mayor convencimiento ha dejado, tanto en el doble pivote como en las bandas. El estilo de toque impuesto por Vidakovic tiene buenos mimbres en esa línea. Álvaro Jurado cuenta con virtudes para ser un líder, y junto a jugadores de la calidad de Fran Cortés, Carlos Caballero, José Miguel Caballero y Lolo -una de las revelaciones de la pretemporada- debe sentirse como pez en el agua. Y Moke, una de cal y dos de arena. En la banda derecha, Enrique debe ser determinante en Segunda B; en la izquierda, muy buenas maneras de Aarón y grata sorpresa del canterano Diego, que ha destapado su mejor fútbol.

De los porteros, apuntar los síntomas preocupantes que dejó Álvaro Campos en la consolación. Dani Miguélez -salvo los sustos con los pies- anduvo en una línea adecuada que le sitúa como titular fijo.

No hay que olvidar que las sensaciones son las que quedan. Y las del Trofeo dicen que el Cádiz tiene que ser más fuerte en defensa y que está obligado a contar con mayor presencia de los delanteros.