“En nuestra organización hay preocupación por la situación actual, pero no exclusivamente por la proliferación de viviendas turísticas; el problema de Cádiz viene de mucho antes y es más amplio”, explica David Cifredo, de Facua-Consumidores en Acción. “Se trata de un problema de falta de accesibilidad al mercado de alquiler que no deriva sólo de las viviendas turísticas. Creemos que a esa situación han contribuido la Ley de Arrendamientos Urbanos y toda la modificación legislativa que se ha hecho en ese campo, que ha ido dificultando cada vez más el acceso al mercado de alquiler”.

“En Cádiz los precios son absolutamente disparatados y las condiciones de las viviendas dejan mucho que desear en muchos casos. Estamos ante una situación endémica de la ciudad derivada, sobre todo, de la escasez de arrendamientos. Se está expulsando a los vecinos tradicionales de los barrios desde hace tiempo”.

“Respecto a la moratoria de licencias de viviendas turísticas que propone Calle Viva, aún no hemos abordado ese debate en el seno de la organización, pero a título personal creo que puede ser una alternativa. En otros espacios se ha hecho”.

"También podemos estar de acuerdo con la tasa turística, pero habrá que ver cómo se desarrolla jurídicamente y a quién afecta. Una tasa turística ligada a restaurar la afección de turismo en el entorno territorial, en sus condiciones ambientales y sociales, nos podría parecer adecuada, pero no tenemos claro el encaje jurídico que podría tener, porque entendemos que entraría dentro del marco jurídico autonómico.

“La tasa de basura industrial que propone Calle Viva podría ser el vehículo municipal de aplicación de esa tasa turística. Pero tenemos que trabajarlo. Nos iremos manifestando conforme vayan surgiendo propuestas de normativas”.