Jornada en Cádiz para apoyar a las personas que han perdido a un ser querido por suicidio

Por cada muerte por suicidio se ven afectadas, al menos, seis personas de su círculo más cercano. Una multiplicación cuyo resultado se ensancha año tras año teniendo en cuenta que ya en 2020 se quitaron la vida en España 3.941 personas, 11 personas al día que colocaron al suicidio como la primera causa de muerte externa de aquel año, duplicando a las víctimas de accidente de tráfico. Así la realidad, se hacen más necesarios que nunca el apoyo y la red de seguridad que tejen organizaciones como la Asociación Andaluza de Supervivientes por Suicidio de un Ser Querido (Ubuntu) que este mismo sábado 19 de noviembre organiza en Cádiz un encuentro.

"Los supervivientes son personas que han perdido a un ser querido por suicidio, iniciando así un duelo complicado caracterizado por la culpa, el estigma, la incomprensión o el tabú. El suicidio es un drama social que no afecta solo a quienes pierden la vida, sino que trae graves consecuencias emocionales a quienes se encuentran en el entorno de las víctimas. Son duelos complejos que chocan con la incomprensión de la sociedad y, en muchos casos, de los propios servicios sanitarios, debido al miedo, al estigma y al tabú que todavía siguen girando alrededor del suicidio", explican los organizadores que a partir de las 9.30 horas de este sábado conmemora el Día Mundial del Superviviente de Suicidio (el tercer sábado de noviembre de cada año) en el Espacio de Cultura Contemporánea (ECCO).

De esta forma, con el objetivo de "prestar atención desde la óptica de familiares y allegados a este grave problema", Ubuntu, en colaboración con la Asociación Papageno y las Delegaciones de Participación Ciudadana y Salud del Ayuntamiento de Cádiz ponen en pie una jornada que cuenta tanto con la mirada de diferentes profesionales como de supervivientes del suicidio de un ser querido.

Así, tras la inauguración a cargo de la presidenta de Ubuntu, María Jesús de León, tomarán la palabra Daniel Jesús López Vega, psicólogo y presidente de la Asociación de Profesionales en Prevención y Posvención del Suicidio (Papageno) y Miguel Guerrero Díaz, psicólogo clínico y responsable de la Unidad de Conducta Suicida UPII Cicerón en Málaga.

Tras una pausa para el café, servido por la asociación solidaria Amigas al Sur, se celebrará una mesa redonda con testimonios de personas que han perdido a un ser querido por suicidio y miembros de la asociación Ubuntu, moderada por Francisco Rodríguez, psicólogo y facilitador de Papageno en grupos de ayuda de Sevilla.

Además, esta dinámica se cerrará con un taller dedicado a trabajar la culpa, coordinado por Silvia Melero, coordinadora del proyecto Luto en Colores. Posteriormente, está prevista la clausura del encuentro con una visita y una ofrenda de flores al árbol del amor de Ubuntu, sembrado hace un año en la Plaza de España, dedicado a la memoria de estas víctimas.

En la actualidad, según explican desde Papageno, los grupos de ayuda mutua para personas que han perdido a un ser querido por suicidio de la Asociación Ubuntu, que se realizan en colaboración con la Asociación de Profesionales en Prevención y Posvención del Suicidio (Papageno), atienden a más de 100 personas.