Las cofradías siguen incluyendo en sus boletines informativos, algunos de gran calidad, o en las mismas solicitudes de salida, las instrucciones para participar en la estación penitencial. Aunque pueda parecer reiterativo es importante cuidar la uniformidad de cada hermano penitente, por lo que aporta a la de todo el cortejo en su conjunto y a la propia imagen de la cofradía en la calle. Una túnica apropiada a la estatura del que la lleva, con el calzado, calcetines y guantes que corresponda en cada caso supone también una demanda de respeto para el que está presenciando la procesión. Otro tema a cuidar es el camino de ida y de vuelta al templo de salida, donde debe imperar el viejo consejo de hacerlo por el camino más corto al domicilio y ahí sí que sobran los paseos con el capirote bajo el brazo.