La huelga de autobuses de Cádiz retrasa la licitación del nuevo contrato

La huelga indefinida de autobuses urbanos que este lunes afronta su día número 19 está teniendo una clara y directa consecuencia para los usuarios, que ven a diario cómo el flujo de vehículos en las diferentes líneas es muy reducido, ya que el servicio se está prestando con unos servicios mínimos del 50%, y sufren cómo subirse a un autobús es en algunos momentos del día prácticamente imposible.

Pero más allá de eso -que no es poco- la huelga está afectando a otras cuestiones de manera indirecta. Y una de ellas es el nuevo pliego de condiciones que debe regir el contrato que el Ayuntamiento quiere sellar para los próximos años con una empresa que se haga cargo del servicio bajo un nuevo escenario técnico y administrativo.

El pliego que acumula años de retraso (desde 2015 viene la empresa Tranvía prestando el servicio de manera precaria) no puede culminarse ahora debido a la incertidumbre de las condiciones laborales en que quedará la plantilla cuando culmine el proceso negociador que viene manteniendo con la empresa y que, precisamente, motiva esta huelga indefinida que comenzara el pasado 10 de julio.

Como es lógico, el acuerdo laboral que cierren empresa y trabajadores será vinculante para la persona jurídica que resulte adjudicataria del nuevo contrato una vez salga a licitación; y del mismo modo, ese escenario laboral debe quedar recogido en los pliegos que saque a concurso el Ayuntamiento. Por eso, hasta que no se cierre un acuerdo que defina las nuevas condiciones de trabajo de la plantilla (en lo que respecta a las cuestiones económicas y también respecto al resto de materias propias de un convenio laboral) no podrá culminarse la elaboración de los pliegos, paso previo a que al fin se inicie el proceso de licitación de este contrato que pasará a ser uno de los de mayor envergadura de la administración municipal, junto a la limpieza.

El último objetivo que se había marcado el gobierno de Bruno García era tener los pliegos finalizados a inicios de verano, de modo que pudiera elevarse la propuesta final de modelo de transporte urbano de viajeros a Pleno y empezar así la maquinaria para la adjudicación del que será primer contrato de este servicio (que hasta ahora se viene prestando mediante acuerdos particulares con la empresa Tranvía). Pero a estas alturas de julio, empieza a cobrar fuerza la idea de que el pliego ya no se culminará hasta principios del próximo curso.

En cualquier caso, contando con este nuevo retraso en el calendario previsto por el Ayuntamiento, se confía en que la reactivación de las negociaciones entre empresa y trabajadores este lunes en el Sercla sirva para que al fin las dos partes encuentren una fórmula que permita el acuerdo laboral, la desconvocatoria de la huelga y la concreción de las nuevas condiciones de la plantilla para incorporarlas a los pliegos y culminar una tramitación administrativa que suma ya una década de retraso.