El desarrollo de la actividad portuaria en la dársena de Cádiz está estrechamente relacionado con su integración en la ciudad, que en los últimos años ha provocado numerosos debates políticos. El retraso que va a acumular la nueva terminal afectará de lleno a este proyecto hasta el punto que el presidente de la Autoridad Portuaria, Rafael Barra, afirma a Diario de Cádiz que "este debate sobre los usos ciudadanos habrá que dejarlo para 2014".

Insiste Barra en considerar como imposible que el actual muelle Ciudad se integre sin más en la trama urbana, una vez se reconvierta en muelle para cruceros, o grandes veleros como pretende también el Ayuntamiento. Recuerda el presidente de la APBC que aunque el puerto de cruceros se separe físicamente del puerto de mercancías, y no comparta espacio como ocurre ahora, "aún será necesaria la llegada de grandes camiones para el aprovisionamiento de los buques para turistas (navíos cada vez mayores y con mayor capacidad", lo que obligará a mantener la seguridad en lo que supone la restricción del paso de viandantes por la zona. Sí considera Barra que podrá ser factible la integración urbana de una parte del muelle Ciudad dejando siempre una separación mediante una valla o cualquier otra estructura de seguridad con el suelo de uso portuario.

Curiosamente, desde el PSOE local también se defiende que este muelle sea un paseo más de la ciudad, formando parte de lo que denominan Plaza del Mar.