El consejero cierra este miércoles el proyecto

El consejero de Justicia de la Junta de Andalucía, Emilio de Llera, visitará mañana miércoles Cádiz para ultimar la operación que va a permitir la ubicación de la Ciudad de la Justicia en varios de los edificios que componen el antiguo complejo tabaquero de Loreto, de propiedad municipal. De esta forma se cumple el compromiso de Susana Díaz, presidenta del gobierno andaluz, de agilizar este proyecto tras la reunión que mantuvo el pasado miércoles con el alcalde, José María González. A la vez, se da un paso esencial para hacer realidad las nuevas dependencias judiciales, tras catorce años de compromisos incumplidos por diversas circunstancias.

En el encuentro entre las dos administraciones, que se celebrará en los mismos depósitos, se concretarán los edificios municipales que pasarán a conformar la futura Ciudad de la Justicia y que ocuparán un mínimo de 10.000 metros cuadrados de superficie útil, que es el espacio que la Junta necesidad para reubicar las actuales dependencias que funcionan en los juzgados de San José, la Avenida y el estadio Carranza. La sede de la Audiencia Provincial se mantendrá finalmente en su sede de la Cuesta de las Calesas, pues estas instalaciones se encuentran en buenas condiciones evitando de esta forma el sobrecoste que supondría su traslado a otro inmueble. Este edificio, que data de los años cincuenta del pasado siglo, es propiedad de la Diputación Provincial, que lo intercambió por el terreno de la Institución Provincial con la administración regional.

El Ayuntamiento ha puesto sobre la mesa unos 14.000 metros cuadrados de la inmensa pastilla de los antiguos depósitos de Tabacalera. Es la zona comprendida entre las naves industriales y el centro de salud de Loreto-Puntales. Los edificios a utilizar, pendientes de definir cuáles son los necesarios, son el antiguo edificio de 1961 dedicado al tabaco elaborado y que forma parte del mismo inmueble donde, en una esquina, está el centro de salud; dos inmuebles ubicados a cada lado del acceso principal a las naves y que en su día funcionaron como viviendas y como oficinas administrativas de la Tabacalera, y una pastilla de una sola planta donde funcionaron dependencias como almacenes, servicios y cafetería así como el cuerpo de seguridad de todo el complejo. Todos estos edificios conforman a la vez una gran plaza ajardinada que habrá que ver si se incluye en la operación.

Fuera de esta actuación quedan las cuatro inmensas naves levantadas en 1908, centro neurálgico de la antigua industria tabaquera, que seguirá en manos del Ayuntamiento para su conversión en un centro de formación, ocio, economía sostenible y otras actividades cuya ejecución está pendiente de conseguir los fondos Edusi, de la Unión Europea. Finalmente, quedan otras naves datadas en los años setenta que siguen en manos de Altadis y donde la empresa privada tiene previsto levantar varios bloques de viviendas de frenta libre.

Tras descartarse la operación de San Severiano, donde iba a ir una Ciudad de la Justicia de nueva planta con un coste superior a los 50 millones y cuyo proyecto arquitectónico estaba ya elaborado y aprobado por la Junta, se barajó la posibilidad de instalar estas dependencias en uno de los edificios de oficinas que dejaba libre Altadis en su antigua sede en la Zona Franca. Como última posibilidad, la Junta tenía guardada la carta de reutilizar la antigua Escuela de Náutica, en La Caleta, como sede judicial aunque la idea es mantenerla dentro de la órbita universitaria.

Habrá que esperar a que la Junta y el Ayuntamiento definan los edificios que se van a utilizar para poder cifrar el coste de instalación de la Ciudad de la Justicia, aunque inicialmente se plantea una inversión de unos 10 o 15 millones, un significativo ahorro respecto al proyecto anunciado en su día en San Severiano.

La Junta defiende la propuesta en la tabacalera "al disponer de unas magníficas instalaciones en un enclave realmente atractivo; se cuenta con aparcamiento subterráneo; la ubicación tiene fácil acceso (desde los dos puentes); permite la recualificación de un espacio simbólico de la ciudad y permite dinamizar económicamente una zona importante de Cádiz".