Uno de los secretos que esconde la Bahía de Cádiz es un cráter de 300 metros de diámetro que sólo se puede observar con nitidez desde las alturas cuando las aguas están mansas. A mediados de los años 80, el investigador Jesús Borrego y el fotógrafo Joaquín Hernández Kiki lo fotografiaron desde una avioneta mientras desarrollaban un reportaje fotográfico, y actualmente vuelve a estar en el punto de mira de un equipo multidisciplinar que está realizando un amplio documental sobre esta depresión de perfecta forma circular. 

Uno de sus miembros, el investigador Eugenio Belgrano, explica cómo surgió esta iniciativa: "Jesús Borrego y yo nos conocimos en la presentación de un libro hace dos años y medio, y allí hablamos sobre el cráter. Y al cabo del tiempo nos pusimos en contacto para investigarlo conjuntamente y realizar un documental sobre él". El trabajo lo están realizando junto al buzo profesional Antonio Melero y al cámara montador David Blanco. Un trabajo que incluirá imágenes aéreas y subacuáticas y entrevistas. 

"Ya contamos con varias horas de grabación -comparte Belgrano-. Hemos estado cuatro días grabando en el agua y disponemos ya de las imágenes subacuáticas. Están pendientes las aéreas, pero tendremos que esperar porque las aguas están turbias. Muy pocas veces al año el agua de la Bahía gaditana está clara, así que debemos desarrollar este trabajo en un momento determinado. Si no existen inconvenientes, podremos subirnos a la avioneta después de un buen temporal de viento del norte, ya que posteriormente el agua está más clara".

El investigador del subsuelo gaditano -junto con su compañero David Blanco ha montado la web Cuevas de María Moco- explica que el cráter se encuentra en la zona de la Bahía donde confluyen las aguas de Cádiz, San Fernando y Puerto Real, "en medio de la Bahía", lo localiza. Y sobre su origen, cuenta que son varias las hipótesis planteadas: "Hay quienes defienden que se formó con la caída de un meteorito; otros señalan la posibilidad de que se trate de una antigua cantera romana; también han apuntado que se trata de la Atlántida por su tamaño y forma circular; hablan de una antigua base OVNI porque hay testimonios de personas asegurando que han visto luces luminosas saliendo del agua, y también hay voces que dicen que allí se hundió la flota de 1596 y se celebró la primera batalla naval contra los franceses, en 1808. Pero esto no es cierto. Nosotros tenemos nuestra propia teoría, que desvelaremos en el documental", sonríe Belgrano. 

Asimismo, los investigadores incluirán en su trabajo entrevistas a pescadores que faenan por la zona, ya que muchos han sido testigos de "fenómenos extraños". Así lo asegura el investigador: "Contamos con testimonios de pescadores que, hace quince años, tuvieron que cortar las redes porque notaban que algo tiraba de ellas desde el fondo y podía hundir la embarcación. También hay pescadores que aseguran haber visto luces entrando y saliendo de la Bahía. Y tenemos imágenes que demuestran que, aunque la profundidad máxima en esas aguas es de 30 metros, la sonda de varias embarcaciones han detectado más de cien metros de profundidad por esa zona". 

Para la realización de este ambicioso documental de 90 minutos de duración, han solicitado colaboración a la Universidad de Cádiz, en concreto, a los departamentos de Química Analítica y Biología Marina, y al Instituto Geológico y Minero de España (IGME) con objeto de que analicen el agua de las profundidades del cráter, así como las algas que allí se forman y el lodo del interior del agujero.

Si no surgen contratiempos, los miembros del equipo estiman que la pieza documental estará lista en el mes de abril del próximo año. Una vez finalizado, los investigadores esperan que una televisión se interese por este atractivo material para su difusión.