El deterioro del aliviadero de aguas pluviales que atraviesa parte de la playa Victoria de Cádiz por la zona de arena, antes de meterse en el mar, ofrece cada día un estado de abandono que ya ha cruzado los límites de la lógica ciudadana.

La imagen de destrozo de esta infraestructura, construida hace apenas 15 años, es tal que dificulta el acceso a este tramo de la Victoria, el más cercano a la playa de Santa María del Mar, y su propia utilización por parte de los bañistas.

En las últimas semanas, y más con los pasados temporales, se han incrementado los destrozos en la zona. Los trozos de hormigón y las placas que cubría la tubería, permitiendo el paso sobre ella, han desaparecido en unos 100 metros de longitud y de encuentran dispersos en su entorno.

El abandono es tal que incluso ya es claramente visible la tubería del aliviadero. Esto supone un riesgo, pues ya no tiene la protección que antes le daba la capa de hormigón, por lo que se podría quebrarse y provocar la salida de las aguas pluviales que van por su interior camino de alta mar.

Este estado de degradación se extiende hasta la frontera entre las playas de la Victoria y Santa María del Mar. Aquí la tubería instalada hace década y media por la Junta de Andalucía está oculta bajo bloques de hormigón, similares a los que se instalaron en su día en el Campo del Sur aunque de menor tamaño. Muchos de ellos ya se han perdido o han sufrido una erosión tal que, también aquí, el aliviadero queda expuesto al aire libre.

Esta zona es también peligrosa si alguien, y sobre todo sin son niños, accede a la misma, con riesgo de caída en los boquetes que se han abierto.

Este deplorable estado, claramente visible desde el Paseo Marítimo, ofrece una imagen de abandono tanto al gaditano como al visitante. La inminente llegada del buen tiempo y la proximidad de la Semana Santa, atraerá como cada año a miles de visitantes, algunos de los cuales optará por ir a la playa gaditana. Y quienes acudan a esta zona sin duda les impactará el estado en la que se encuentra. Mala publicidad para la ciudad. Y más cuando cada vez estamos más cerca de la temporada de verano.

Junto a todo ello, estos destrozos podrían afectar a la consecución de un nueva bandera azul para este tramo de nuestro litoral.

Desde hace años el Ayuntamiento de Cádiz viene reclamando a la Junta que ejecute obras para arreglar todos estos problemas. Ya en 2014 esta infraestructura comenzaba a dar problemas.

En septiembre de 2022 la empresa municipal Aguas de Cádiz resaltó que la Junta de Andalucía "se creó un paseo marítimo (sobre la gran tubería) endeble, flotando sobre la arena, sin estar fijado al estrato rocoso y sin tener en cuenta las condiciones hidrodinámicas del litoral. Tan pronto como ha bajado el perfil de la playa, las protecciones que se pusieron por parte de la Junta tras los primeros temporales que destrozaron el paseo marítimo, quedaron prácticamente en el aire y con numerosos daños". La Junta considera, por su parte, que todo es un problema de mantenimiento por parte de la Junta.

Esta situación se ha repetido desde entonces hasta llegar al estado límite actual.