La Universidad de Cádiz ha abonado ya al Ayuntamiento el millón de euros que compensa la operación de cesión de espacios que ambas administradores acordaron hace meses y que ya se ha hecho efectiva con el traslado de la institución académica al Reina Sofía, donde se ha establecido la nueva sede del Rectorado. El pago de esta contrapartida se realizó a principios de este mes de julio, como ha trasladado el nuevo rector, Francisco Piniella, al alcalde de la ciudad, José María González, durante el encuentro que han mantenido este viernes.

En ese primer encuentro González y Piniella han abordado de manera directa la siguiente fase de ese convenio de colaboración entre Ayuntamiento y UCA. Se trata del futuro uso del Teatro José María Pemán y de los bajos de la pérgola de Santa Bárbara. De hecho, el Ayuntamiento ya tenía contemplado utilizar ese millón de euros de la UCA en finalizar la construcción del teatro ubicado en el Parque Genovés, que será utilizado por la Universidad como paraninfo al aire libre. Por su parte, los bajos de la pérgola de Santa Bárbara, que apenas han tenido uso desde que se inauguró el equipamiento, servirán para habilitar distintos talleres universitarios que apenas tienen sitio en la actualidad en la facultad de Filosofía y Letras.

Piniella y González han ahondado sobre estos proyectos que, en definitiva, buscan fortalecer ese cinturón universitario del Campus de Cádiz. Y en este sentido también han puesto sobre la mesa –según ha trascendido al término de ese encuentro– la cesión por parte del Ayuntamiento de los terrenos del Campo de las Balas para que se conviertan en las pistas deportivas que servirán cuando la Facultad de Ciencias de la Educación se ubique en el edificio Valcárcel.

En este sentido, conviene recordar que en el Campo de las Balas quedó descartada la construcción de una ampliación del Hotel Atlántico, tras lo cual el actual equipo de gobierno suspendió la subasta de los terrenos que pretendía el anterior gobierno del PP para la construcción de un hotel. Ahora, la intención es otorgarle este uso deportivo–universitario cuando Educación se traslade a la capital y cuando Zaragoza Urbana acepte finalmente la construcción de un hotel en las actuales pistas deportivas de Valcárcel, junto a la calle Virgen de la Palma.

A tenor de lo que ha trascendido de la reunión entre el rector y el alcalde, el cambio de responsable en la Universidad no afecta a los proyectos que se pusieron en marcha en la recta final del mandato de Eduardo González Mazo, así como tampoco varía un ápice el Ayuntamiento tras la remodelación del equipo de gobierno fruto de las elecciones municipales del mes de mayo.