La mudanza del Rectorado de la Universidad de Cádiz (UCA) de su sede en la calle Ancha a la nueva en el hasta ahora Centro Cultural Municipal Reina Sofía sigue en marcha, de manera que, según ha podido saber este periódico, ya se ha trasladado aproximadamente la mitad de los alrededor de 60 trabajadores que emplea y la mayoría de los departamentos. Se trata del principio del convenio firmado entre ambas instituciones para convertir el frente litoral entre el Reina Sofía y Valcárcel en un Campus universitario único en Europa.

En el edificio del antiguo Gobierno Militar se encuentran ya todos los servicios dependientes de la Secretaría General, de Auditoría y el Consejo Social. Así, ya han ocupado sus nuevos emplazamientos los trabajadores del Gabinete Jurídico, la Defensoría Universitaria y la Oficina del Registro en un edificio mucho más luminoso que el del palecete de Ancha, pero en un espacio similar.

En la ya antigua sede del Rectorado prácticamente sólo queda el despacho y el Gabinete del Rector, la Dirección General de Relaciones Institucionales y el Gabinete de Comunicación y Marketing.

En el antiguo centro cultural sólo quedará la Fundación Federico Joly

La instalación de los departamentos en cada una de las plantas del antiguo Centro Cultural Municipal Reina Sofía tiene de momento carácter provisional, apuntan fuentes bien informadas, ya que todavía habrá que hacer una serie de mejoras en algunas dependencias que no cuentan, por ejemplo, con calefacción.

En principio está previsto que del antiguo centro cultural en el edificio de la Alameda sólo quede la Fundación Federico Joly y que las colecciones del escultor Juan Luis Vasallo y de la familia Arámburu se trasladen a la Casa de Iberoamérica, que se convertirá en un espacio cultural puro y duro, una vez trasladadas a la calle Ancha las oficinas municipales que alberga. La antigua Cárcel Real acogerá también las bibliotecas de la Real Academia Hispanoamericana y del Ateneo de Cádiz.

En cualquier caso, la Universidad ha solicitado al Ayuntamiento que permanezcan en el nuevo Rectorado las obras de la Sala Arámburu.