La nueva vida que Junta, Diputación, Ayuntamiento y UCA se comprometieron a dar a Valcárcel en octubre ya acumula su primer retraso respecto al calendario anunciado tras aquella reunión a cuatro bandas celebrada en Sevilla. El primer objetivo de las administraciones era firmar el convenio que fija los compromisos, partidas económicas y obligaciones de cada parte antes del 19 de diciembre, que era la fecha en la que expiraba el convenio que Diputación y UCA sellaron hace cinco años para la cesión del edificio y su conversión en centro universitario. Pero cumplida esa fecha, aún quedan trámites pendientes para poder cerrar ese acuerdo y plasmarlo en el esperado documento.

En concreto, el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía aún no se han pronunciado respecto al borrador del convenio que la Universidad remitió hace un mes (a mediados de noviembre) fijando las cláusulas que harán posible rehabilitar el histórico edificio y construir todo lo necesario para que la Facultad de Educación se establezca en el centro de Cádiz.

Sí envió ya respuesta la Diputación Provincial, que incorporó pequeñas matizaciones al borrador redactado por la UCA para confirmar así su participación en el proyecto, que básicamente consiste en aportar el edificio (que la administración provincial cifra en 31 millones de euros, aunque ese valor contrasta con el mal estado actual del inmueble) y una partida de 3 millones de euros para el equipamiento de la nueva facultad cuando esté construida (equivalente al 50% del coste de esa partida).

Por tanto, en la Universidad están ahora a la espera de recibir respuesta de las administraciones autonómica (que es la que más se compromete, con una cifra de 29 millones de euros que aportará en varias anualidades) y local (que aportará 5 millones de euros) respecto al documento inicialmente elaborado para dar el siguiente paso, que consistirá en incorporar al documento las correcciones propuestas por cada parte para proceder, al fin, a la firma del convenio.

Este proceso pendiente hace pensar que todavía serán necesarias todavía varias semanas para tener cerrado el documento que acepten las cuatro administraciones, teniendo en cuenta además las fechas actuales de Navidad con sus correspondientes festivos y vacaciones. Así que no será hasta principios de 2023, en el mejor de los casos, cuando se proceda a firmar el convenio.

El retraso puede afectar de lleno a la previsión de plazos que en esa reunión de octubre hicieron los representantes de la Junta, la Diputación, el Ayuntamiento y la UCA. Allí se habló de licitar las obras de Valcárcel a principios de 2023, para empezar su ejecución a mediados de ese año. Una previsión que ya entonces parecía excesivamente optimista y que debido al retraso en la firma del convenio será prácticamente imposible de cumplir. Por tanto, empieza ya a esfumarse la posibilidad de que en el año 2026 esté abierta la facultad de Educación en el histórico edificio que a escasos días de que termine el año sigue a la espera.

La intención de las administraciones es que la obra durara tres años, desde mediados de 2023 hasta el primer semestre de 2026. Pero a día de hoy, sin convenio aún firmado ni con fecha prevista para hacerlo, resulta del todo inviable que en los próximos meses pueda licitarse la obra, que requerirá toda la tramitación previa de proyectos y pliegos.