Primero, el verano. Y después, la Gran Regata, el South International Series Festival, para terminar con una nueva edición de SailGP.

Un intenso calendario de eventos que, unidos a un tiempo libre de nubes y lluvia a modo de una extensión del verano, ha llenado la ciudad de turistas y de participantes en estos acontecimientos culturales y deportivos.

Nunca la ciudad había vivido un inicio del otoño con tanto ajetreo urbano. Nunca la hostelería y los hoteles habían logrado ampliar su campaña de verano hasta bien metido el mes de octubre, con grandes datos de ocupación y con las terrazas con el cartel de completo.

Esta semana se inicia el Festival Iberoamericano de Teatro que, aunque con menor tirón que los eventos citados, puede dar cierta continuidad al fragor de estas semana. Sólo el tiempo, con el anuncio de la llegada de las lluvias, puede romper esta excelente racha para la ciudad.

Lo cierto es que este último mes ha demostrado algo que ya se suponía pero no se asumía: es necesario contar con eventos extraordinarios para afianzar la ciudad como referente turístico y comercial y, con ello, tirar de la economía de la ciudad.

Este domingo el alcalde, Bruno García, coincidía con este análisis, al valorar el éxito de SailGP: “Nosotros en Cádiz tenemos el verano ganado, pero tenemos que ir proyectando eventos fuera de fecha para que el impacto económico sea el máximo posible durante todo el año”.

Plantear este tipo de eventos no es sencillo. Si se busca uno de calado nacional, que atraiga visitantes de otros puntos del país, se necesita el paraguas de empresas privadas o instituciones públicas, habida cuenta de los limitados recursos municipales. Y se necesita, también, propuestas atrayentes que tengan calado y continuidad en el tiempo, como va a pasar con el festival de series que ya está garantizado al menos para los dos próximos años, o la Gran Regata donde Cádiz es puerto obligado desde 1992.

Hoteles, restaurantes y bares, y también otros sectores económicos como el taxi o el comercio, se han beneficiado. No hay una cifra exacta sobre el movimiento económico, pero es millonario. E incide, además, sobre varios de los sectores económicos más relevantes de nuestra economía.

Antonio de María, presidente de Horeca, coincide en esta búsqueda de eventos que complementen la oferta de la ciudad más allá del verano. Lo cierto es que De María ya lleva tiempo planteando esta propuesta.

“Es lo que llamamos elemento tractoral. Cuando se hace este tipo de eventos se mira a quién afecta y éstos afectan, benefician, a toda la ciudad”, destaca el presidente de Horeca.

La buena imagen de Cádiz

A la hora de conseguir la atracción que acompaña a estos festivales tiene un papel relevante la ciudad donde se celebra y aquí, afirma Antonio de María, juega con ventaja.

“Cádiz goza de una gran aceptación más allá de sus fronteras. Ver en televisión preguntar a la gente dónde va a veranear o dónde le gustaría, y todos dicen Cádiz. Ahora tenemos un tirón espectacular”. Igual ha pasado con los actores y actrices que han estado en el festival de series, con elogios unánimes a la ciudad y a sus vecinos.

“El público gaditano reparte cariño al que viene a la ciudad. Le da jaleo, ánimo, diversión. Ese es un patrimonio único, el más importante que tenemos, porque todos los que vienen a estos acontecimientos culturales o deportivos lo valoran mucho”.

A la hora de ver cómo se divide todo el año a la hora de contar con eventos de una forma más o menos continuada, Antonio de María menciona los meses de octubre y noviembre como los dos con menos potencial.

El cambio en el clima, cuando el verano se alarga cada vez más, ya mete a octubre casi en el final de la temporada estival. Queda así rezagado noviembre, como mes que hay que ayudar.

“Octubre y noviembre siempre han sido los meses más flojos en el sector (hoteles y hostelería). Hay que plantear tema relacionados con la cultura y otras actividades que impulsen también estas semanas del año”, se pide desde la patronal.

Potenciar los festivales más gaditanos

A la vez, Antonio de María considera que hay que potenciar actividades ya en marcha por el Ayuntamiento, como el FIT, los festivales de danza y títeres o el Festival de Música que organiza la Junta.

Reclama más fondos para estos festivales, algunos en marcha desde hace décadas, y que con ello se le den más proyección y eco más allá de la propia provincia. “Todos estos eventos nuestros deberían de consolidarse y potenciarse, tras mucho tiempo casi abandonados con presupuestos más bajos. Son, además, un nicho de empleo tanto para la cultura, lo que es esencial para cualquier ciudad, como para la hostelería y el comercio”, concluye el presidente de Horeca.

Lo cierto es que afrontar mejoras en estos eventos ya existentes como en otros nuevos que se puedan conseguir para ubicarlos a lo largo de todo el año, supone una elevada inversión.

Aunque el nuevo gobierno municipal de Bruno García ya se ha comprometido a apostar más por la cultura, lo cierto es que es necesario contar con las restantes administraciones. La Diputación Provincial ya ha abierto canales de colaboración muy estrecha con el Ayuntamiento, como ha pasado con la Gran Regata. En cuanto a la Junta, debe incrementar sus subvenciones a estas actividades, mientras que el Estado sigue con su política de destinar escasas inversiones a ciudades como Cádiz.

Una manera de conseguir dinero extra para financiar estos proyectos, y los que puedan ponerse en marcha, sería la imposición de una tasa turística a todos los usuarios de los distintos tipos de alojamientos que hay en la ciudad.

Es una norma que ya funcionaba en numerosas capitales de medio mundo y que con un mínimo incremento en los costes de la residencia, se obtienen fondos muy elevados.

Este es un debate que se mantiene aún abierto en la región y en la propia administración regional.Otra posibilidad sería que la hostelería, beneficiada por estas actuaciones, colaborase en la financiación de las mismas, como también ocurre en otras capitales.