Las ciudades de Cádiz y San Fernando han conmemorado el traslado de las Cortes de la Isla de León a la capital gaditana hace 200 años donde finalmente se promulgaría la primera Constitución de Cádiz, conocida como «La Pepa».

A mediodía de hoy los «diputados» y el «Supremo Consejo de Regencia» se han despedido de San Fernando desde el dosel instalado en la fachada de la Iglesia Conventual del Carmen y han emprendido rumbo a Cádiz, donde han sido recibidos por las autoridades de ambos ayuntamientos y del Consorcio para la Conmemoración del Bicentenario.

Ha sido en la plaza de España de la capital gaditana donde se han rendido honores a los fallecidos por las libertades y ha tenido lugar un desfile a cargo de Asociaciones de Voluntarios Distinguidos de Cádiz, la Guardia Salinera de La Isla y la Unidad de Banda de Música de Época.

Fue un 16 de febrero, una vez que se había constatado que Cádiz estaba saliendo del brote de fiebre amarilla -epidemia que azotaba la zona- cuando las Cortes decidieron que el 20 de febrero de 1811 sería el último día en el que las sesiones se celebrarían en la Isla de León, en la bahía de la ciudad, y que cuatro días después se reanudarían en la capital gaditana.

El alcalde de San Fernando, Manuel María de Bernardo, ha recordado que durante cinco meses, «en la isla se ofició el decreto de Estado moderno y el nacimiento de una nueva era donde se estableció la soberanía nacional, la separación de poderes y la transición de súbditos a ciudadanos».

"Mantenemos con orgullo nuestra aportación al Estado moderno», ha añadido De Bernardo, quien a su vez ha destacado «la oportunidad de desarrollo económico que ha sido la celebración del Bicentenario para ambas ciudades».

Por su parte, la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, ha incidido en que «si San Fernando fue el baluarte invencible, Cádiz fue ciudad de libertades».

A partir de hoy, Cádiz tomará el relevo de San Fernando en los actos de conmemoración del Bicentenario de la primera Constitución liberal.