El último altercado vivido en la Punta de San Felipe este fin de semana, que se une a otros de cierta consideración acaecidos este verano, ha provocado la reacción de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) de Cádiz denunciando el incumplimiento del operativo de seguridad que se despliega en esta zona de ocio. Mediante un comunicado, el sindicato señala que la Policía Local "acaba siendo el único cuerpo de seguridad que permanece siempre en dicho dispositivo, encargándose de servicios que les corresponde a otros cuerpos de seguridad", en relación, sin nombrarla, a la Policía Nacional. El CSIF destaca que "en teoría" los agentes locales deben dedicarse exclusivamente al control del tráfico y de las ordenanzas municipales "pero al final los agentes también se encargan de sofocar reyertas y atender cualquier tipo de incidente". Esta situación, según denuncia el sindicato, "pone en riesgo la integridad física de los agentes de la Policía Local, ya que no disponen de los medios adecuados para este tipo de intervenciones de emergencia ni tampoco cuentan con los efectivos suficientes para actuar en la zona habilitada para el botellón". 

El CSIF lamenta asimismo que durante el invierno se despliega un dispositivo de media de diez agentes, y durante el verano, el operativo se queda con entre dos y cuatro agentes, al tener que atender otras zonas de la ciudad al mismo tiempo con menos efectivos. "Una situación que, a todas luces, resulta insuficiente, ante el gran número de personas que se concentran en la Punta de San Felipe durante las noches de fin de semana". Al mismo tiempo defiende la presencia constante de los agentes de la Policía Local "siendo la unidad que siempre se encuentra en su sitio". La situación lleva al CSIF a solicitar a los miembros de la Mesa de Seguridad, donde están presentes todas las administraciones públicas, "que se ocupen de cumplir estrictamente los acuerdos adoptados y, en caso de que no se puedan llevar a cabo las medidas acordadas, que se determine el cierre preventivo de la Punta de San Felipe como lugar específico para la práctica del botellón". 

Por su parte, fuentes de la Policía Nacional evitaron ayer manifestar su opinión ante estas críticas del CSIF, instando a debatir el tema en la próxima reunión de la Mesa de Seguridad. Al respecto de la situación de peligrosidad en la Punta de San Felipe, otras fuentes policiales consultadas por Diario de Cádiz señalaron que el número de incidentes no ha aumentado, aunque sí el de jóvenes con un perfil más agresivo de lo acostumbrado. 

Un verano movido

El último altercado se produjo en la madrugada del pasado domingo cuando un joven de 22 años que había participado en dos conatos de peleas fue detenido por un intento de agresión a un policía local, después de que este le recriminara su participación en las broncas. El detenido esgrimió incluso una botella de cristal para amenazar al agente. El día antes, una joven fue rociada con gas pimienta y un joven sufrió una agresión leve en el rostro con herida leve que precisó asistencia médica. Pero el mayor altercado se produjo en la madrugada del 18 de agosto con una pelea multitudinaria entre dos grupos de jóvenes, con el resultado de una puñalada y una herida por botellazo. Como consecuencia de este incidente la Policía Nacional detuvo a dos menores.