La empresa pública Adif, que gestiona el complejo ferroviario de Cádiz, ha adjudicado a la empresa Proforma Ejec de Obras Restaura, los trabajos para culminar las tareas que tiene pendiente dentro del Plan Plaza de Sevilla.

El proyecto que acomete ahora esta constructora, y que tiene como plazo de ejecución ocho meses, se centra en la construcción de un aparcamiento en superficie en el solar donde se instalaba la carpa de Carnaval y se celebraban conciertos en verano (en el acceso a la avenida de Astilleros), en la urbanización de la calle de acceso a la terminal férrea de 1905 y en el viario que conecta la plaza de Sevilla con el vestíbulo de la estación y el hotel que se va a construir sobre esta estructura.

La inversión se eleva a 3.455.624 euros. Ha sido la oferta más ventajosa de las cinco que recibió Adif, pues supone un ahorro de 700.000 euros respecto al presupuesto base de licitación. Llama la atención este precio más bajo en un momento en el que los costes en la construcción se han disparado, hasta el punto de quedar desiertos proyectos impulsados por otras administraciones. La operación cuenta con la financiación de los fondos europeos.

La ejecución de estas obras son las últimas que tenía pendiente Adif dentro del Plan Plaza de Sevilla. Ha sido un proceso largo, muy largo, desde que comenzó a finales del siglo pasado el soterramiento de la vía del tren y la construcción de la nueva terminal. Y ha sido, también, un proceso extremadamente complicado.Por lo pronto, Adif ha terminado por financiar solo una parte de lo que le correspondía en los primeros convenios, firmados con el Ayuntamiento y la Junta.

La imposibilidad de construir bloques de pisos en los terrenos de su propiedad en la avenida de Astilleros, y la dificultad con la que se encontró para la adjudicación de espacios inicialmente tan golosos como los de la vieja estación y el hotel sobre el vestíbulo, provocaron que Adif incumpliese sus obligaciones. Cabe recordar que se han llegado a celebrar hasta tres subastas para la venta del suelo en la avenida de Astilleros, al igual que antes de la llegada del Mercado Gastronómico fracasaron dos operaciones comerciales en la terminal de 1905.

Con esta financiación, Adif debía pagar la reforma de la avenida y la urbanización del parque de la Muralla.Con el actual gobierno municipal Adif cerró hace meses un nuevo acuerdo que le liberaba de estas obligaciones, que no pensaba cumplir por lo que el Plan Plaza de Sevilla estaba parado y sin posibilidad de reactivación. El Ayuntamiento asumió la financiación de estas obras y a cambio se quedó con los terrenos sin uso en la avenida de Astilleros.

Así que, tras décadas de avances, parones, desencuentros y más de una bronca institucional, Adif afronta su último papel en una de las operaciones urbanísticas más relevantes en la ciudad.

Con esta inversión de 3,4 millones de euros se habilitarán 261 plazas de aparcamiento en superficie, una oferta muy relevante ante la falta de estacionamientos en el acceso al casco histórico de la ciudad.

El mayor porcentaje se va a ubicar en el lateral de la antigua terminal, que tiene una superficie de 6.866 metros cuadrados. Será un aparcamiento en superficie, parcialmente cubierto y controlado, con 177 plazas más 6 para personas con movilidad reducida.

En la primera versión del convenio sobre la Plaza de Sevilla, se iba a construir un aparcamiento subterráneo, lo que se descartó por su coste.

En esta operación se incluye el acondicionamiento de un nuevo espacio peatonal frente a la fachada principal de la antigua terminal, con 754 metros cuadrados, lo que permitirá conectar el nuevo aparcamiento con el futuro parque de la Muralla. A la vez, permitirá la reapertura del acceso histórico a la estación de 1905, que se abrirá cuando comience a funcionar el Mercado Gastronómico.

La tercera pata de este proyecto se centra en el vial de acceso sur, que con 11.228 metros cuadrados, y que va paralelo a la vieja estación hasta conectar con el edificio del vestíbulo y la actual entrada a la terminal ferroviaria. Aquí se habilitará una doble vía en ambos sentidos y una fila de aparcamientos en cada lado, con 75 plazas más 3 destinadas a personas con movilidad reducida.

Si se cumplen los plazos, y una vez iniciadas las obras, todo debería de estar listo en el segundo trimestre de 2023. Coincide la adjudicación de estos nuevos equipamientos con el final de las obras de instalación de la nueva red de saneamiento por parte de la empresa municipal Aguas de Cádiz en la avenida de Astilleros, que permitirá dar servicio a todos los edificios de la zona.