Izquierda Unida guardaba una "sorpresa" para su gran acto central de campaña para las autonómicas: Julio Anguita, que lleva 15 años sin subirse en un atril en un evento de estas características, participará en el mitin previsto el miércoles en Málaga junto al candidato a la Presidencia de la Junta, Antonio Maíllo, y el aspirante de IU a presidente del Gobierno, Alberto Garzón. El propio Anguita, que fue coordinador general de IU entre 1989 y 2000, año en el que se retiró tras haber sufrido un infarto, fecha su última intervención en aquella campaña de inicio del milenio donde coincidieron elecciones generales y autonómicas.

Anguita ha participado en actos orgánicos y de apoyo a IU en las municipales, e incluso en la campaña de las elecciones generales de 2011, "ante la inmensa gravedad del momento" y el "panorama pavoroso de la crisis de la civilización occidental", volvió a subirse a un atril e intervino ante unas 500 personas en Córdoba. Pero desde hace 15 años no intervenía en un acto de campaña que se espera multitudinario para apoyar a un candidato autonómico, en este caso, Antonio Maíllo. Anguita ha mantenido en los últimos una actitud crítica con la decisión de la coalición de pactar con el PSOE en Andalucía para formar parte del Gobierno autonómico.

En una entrevista con Efe el pasado 27 de enero, tras la ruptura del pacto y el adelanto de las elecciones andaluzas, Anguita consideró que IU cometió "un error" al creer que el PSOE "sigue siendo de izquierdas" y entrar en el Gobierno andaluz, "y ahora lo está pagando". Además, lamentó que, con su entrada en el Gobierno andaluz, IU "aceptó recortes, que no solamente eran los que aplicaba el Gobierno de Madrid, sino los que la Junta hizo".

Anguita volvió al primer plano hace unos tres años con el bloque social Somos mayoría y alentó a la convergencia entre IU y Podemos, para cuyos dirigentes es una referencia. Pablo Iglesias dijo de él que es el único político que salvaría de la quema. Por su parte Maíllo, que ayer se reunió en Linares con ex trabajadores de Santana a las puertas de la fábrica, apostó por un proceso de reindustrialización que permita aumentar el peso de este sector en el PIB para tener "mayor empleo estable y de calidad" y defendió el concepto de "arraigo" de las empresas.