Existen grandes proyectos. Por su envergadura. Por su trascendencia. Pero también existen otros cuya finalidad, el ocio y esparcimiento, la potenciación turística, los relegan a un segundo plano en la prioridad de la agenda política. De uno de ellos habló ayer el portavoz de los socialistas, el candidato a la Alcaldía Fernando López Gil, quien reconoció que esta demanda, la de la construcción de una piscina de verano, fue tenida en cuenta por su grupo a fuerza de repetición de diferentes colectivos. "Hace más de diez años que el isleño no cuenta con una piscina, desde que se cerrara la del Parque, en la que se invirtió dinero entre 2003 y 2007 para absolutamente nada porque nunca se volvió a abrir", explicaba en un primer momento López.

La primera de las incógnitas en despejarse, la más suculenta, su ubicación. Porque la propuesta de los socialistas pasa por ubicarla en los polvorines de Fadricas, precisamente en la zona a la que el Ayuntamiento tiene aplicada una reserva de suelo. "Cuando gobernemos, lo primero que haremos será quitar esa reserva de suelo y sentarnos a negociar a cuatro bandas. La situación actual lo único que ha conseguido es bloquear el espacio cuatro años", apuntaba López. Estas cuatro bandas corresponden a propietarios, reversionistas, Ministerio de Defensa y Junta de Andalucía, "porque ésta debe entrar a formar parte de la misma", espetó.

La piscina descubierta, matizó López, se instalará concretamente en 65.000 metros cuadrados, en zona de dominio público marítimo terrestre -cien metros desde la orilla-, en la que no se puede construir pero sí desarrollar equipamiento público. Se trataría de un espacio el altura, con varias láminas de agua y con vistas a la Bahía de Cádiz. Además podrán instalarse hasta cinco espacios de restauración, en los que también se podrán generar actividad nocturna con la incorporación de una carpa, entre otros elementos.

La viabilidad del mismo se ha consultado con expertos y empresarios, que han mostrado su interés por la actuación, explicaba el alcaldable. Existen además precedentes en otras ciudades como Tenerife o Ceuta, "en los que espacios de este tipo se han convertido en importantes generadores de actividad económica", incidía el portavoz. El objetivo final, insistía, es hacer de este entorno y de toda la localidad en su conjunto "un valor añadido. La idea es revolucionar San Fernando, no cambiarla", apuntó. Otro elemento de esta revolución será la adaptación a personas de movilidad reducida del proyecto y, de nuevo, de toda La Isla. "Construiremos la ciudad de la inclusión".