La Armada se despidió ayer en el muelle del Arsenal de La Carraca del patrullero Cándido Pérez, que causó baja definitivamente en la lista oficial de buques tras 32 años de servicio.

El almirante de La Carraca, José Ángel Pita Rodrigo, recogió la bandera del buque de manos de su último comandante, el teniente de navío Julio Pérez Macías, un simbólico acto castrense que representó el cese de actividad del patrullero, el último de una serie de seis P-16 que se construyeron en su día en la Empresa Nacional Bazán, en la misma factoría de San Fernando.

El Cándido Pérez, de hecho, fue botado el 8 de marzo de 1977 y entregado a la Armada poco tiempo después, el 25 de noviembre de ese mismo año. En 1993, tras quince años de servicio, recibió su bandera de combate en Sada (La Coruña).

Un total de 33 comandantes ha pasado por este buque a lo largo de sus 32 años de servicio a la Armada española. El patrullero ha tenido siempre su base principal en el Arsenal de La Carraca y ha participado en numerosas operaciones y ejercicios marítimos, entre ellos, el más destacado, la desarrollada en el islote de Perejil en 2002.

El Cándido Pérez -el patrullero tomó el nombre de un alférez maquinista fusilado por las tropas republicanas durante la Guerra Civil tras ser apresado en Bilbao- ha estado también integrado en los Mandos Operativos Conjuntos de Ceuta y Melilla y ha participado en el dispositivo multinacional de la operación Active Endevour-Strog con el objetivo de escoltar a los mercantes que cruzan el estrecho de Gibraltar. Durante los últimos años de servicio ha desempeñado fundamentalmente funciones de tráfico marítimo hasta pasar al muelle de La Carraca, donde ha quedado inactivo y, desde ayer, causar baja definitivamente en la lista oficial de buques de la Armada.