PEDRO, Juan y Santiago, los tres apóstoles que la iconografía clásica sitúa en el misterio pasional de la Oración en el Huerto desde los tiempos del maestro Salzillo llegaron ayer tarde a La Isla para completar a la pastoreña hermandad del Martes Santo, que verá cumplido un nuevo hito cofrade en su próxima salida procesional.

La incorporación de las tres imágenes secundarias al misterio hortelano será sin duda el gran estreno de esta Semana Santa. Salidas del taller del imaginero sevillano Fernando Aguado, el mismo que se encargó de la restauración del titular de la cofradía en 2009, las tres tallas suponen además la terminación de un proyecto en el que la hermandad lleva trabajando desde finales de los años 90 y que empezó con la realización de las nuevas andas procesionales del Cristo para continuar con luego con las fases de dorado, policromía, las cartelas, la sustitución de los candelabros por otros más adecuados al conjunto...

La realización de los apóstoles durmientes fue aprobada por los hermanos en un cabildo de hermanos extraordinario que se realizó en el año 2012, si bien ya entonces se apuntó que se trataba de un proyecto a varios años vista. Su estreno, inicialmente, estaba previsto para la Semana Santa del pasado año si bien luego fue aplazaado para el Martes Santo de 2015. La necesaria autorización del Obispado llegó a la hermandad en el pasado mes de diciembre, que fue cuando se formalizó el contrato con el imaginero.

Las imágenes fueron recogidas ayer de los talleres sevillanos de Aguado para trasladarlas a La Isla, donde se procedió a su bendición en la parroquia de la Pastora tras la misa de las ocho de la tarde. Fue el propio párroco, Luis Palomino, el que se encargó de la bendición. Allí, junto a la puerta lateral del templo, se improvisó un altar que permaneció expuesto hasta las nueve y media de la noche para que los hermanos -y todo el que quisera- pudiera contemplar las nuevas efigies secundarias de la hermandad del Huerto.

Lo cierto es que por el templo pasaron numerosos curiosos deseosos de contemplar la gran novedad de la Semana Santa isleña de 2016.