Google amplía su ecosistema de inteligencia artificial con dos nuevos modelos abiertos, Gemma 2B y 7B, con la misma tecnología de la IA multimodal Gemini y pensados para ayudar a desarrolladores e investigadores a crear IA "de forma responsable".

La compañía asegura que es un nuevo paso en su objetivo de hacer que la IA "sea útil para todos", facilitando nuevos modelos abiertos para que cualquier desarrollador pueda acceder a esta tecnología y experimentar con ella.

Así, esta nueva familia Gemma se compone de dos modelos de distintos tamaños, Gemma 2B y Gemma 7B, cada uno con variantes entrenadas previamente y permiten tanto la investigación como el desarrollo.

En un comunicado en su blog, Google indica que están desarrollados por Google DeepMind y otros equipos de la tecnológica e inspirados en Gemini, ya que parten de la misma investigación y tecnología y comparten componentes técnicos y de infraestructura.

Con ello, Gemma 2B y 7B son capaces de lograr "el mejor rendimiento de su clase" para sus tamaños, en comparación con otros modelos abiertos del sector. La compañía asegura que su nueva familia de modelos "supera significativamente" a otros modelos más grandes "en puntos de referencia clave".

Los Gemma pueden utilizarse a través de las herramientas para desarrolladores Kaggle y Hugging Face y también están optimizados para Google Cloud, con la plataforma de aprendizaje automático de la compañía, Vertex AI, que ofrece un amplio conjunto de herramientas MLOps con el que permite varias opciones de ajuste e implementación "con un solo clic", mediante optimizaciones de inferencia integradas.

Google incluso se ha asociado con Nvidia para que Gemma sea compatible para las GPU de la compañía.

Estos dos modelos pueden ejecutarse directamente en un ordenador portátil o de escritorio y también en dispositivos móviles y la nube, para que sus capacidades de IA sean "ampliamente accesibles".

IA responsable

La compañía ha insistido en que se trata de una familia de modelos diseñada para crear IA de forma responsable y que cumple con los estándares de Google para ofrecer resultados "seguros y responsables".

Para garantizarlo, Google ha utilizado técnicas automatizadas en modelos previamente entrenados de Gemma para filtrar "cierta información personal y otros datos confidenciales" de los conjuntos de entrenamiento.

En el entrenamiento de los modelos también han utilizado aprendizaje por refuerzo a partir de la retroalimentación humana (RLHF, por sus siglas en inglés) para que estén alineados con los comportamientos responsables de la empresa.

Tras su entrenamiento, Gemma ha sido evaluada por equipos rojos manuales, es decir, personal especializado que ha llevado a cabo pruebas adversas automatizadas y evaluado sus capacidades para actividades peligrosas.

Los desarrolladores podrán acceder a un kit de herramientas de inteligencia artificial responsable con funciones que permiten a los desarrolladores configurar barreras (por ejemplo, limitar el uso de ciertas palabras por parte de la IA) y otras herramientas que facilitan analizar los comportamientos de los modelos para identificar problemas y corregirlos.

Gemma ya está disponible para todos los desarrolladores a nivel global, con unos términos de uso que permiten su uso comercial y la distribución responsable "para todas las organizaciones", sin importar su tamaño.