La música procesional ha sido esta noche el tema estrella del pleno que ha vuelto a reunir a los hermanos mayores de las cofradías gaditanas después de todo lo ocurrido tras el decreto del estado de alarma y la suspensión de la Semana Santa. El pleno celebrado en el salón de actos del colegio de Salesianos ha originado un amplio debate sobre la situación que han generado los contratos de las hermandades con las formaciones musicales que acompañan tras los pasos. Y fruto de ello, los hermanos mayores han acordado crear una comisión que estudiará cuál es la situación contractual y cómo se están redactando los contratos y las distintas cláusulas, para garantizar la seguridad jurídica de las corporaciones.

El problema de las bandas se ha convertido en uno de los principales para las hermandades tras suspender sus salidas procesionales. El presidente del Consejo ya se pronunció en su día trasladando a las cofradía la realidad jurídica, que exime a las dos partes (a la banda y a la hermandad) del cumplimiento contractual al no haberse podido celebrar debido a la situación extraordinaria originada por el estado de alarma. No obstante, la mayoría de formaciones musicales ha exigido, o solicitado, recibir una parte de ese contrato para poder seguir afrontando sus gastos ordinarios.

Por tanto, a raíz de lo ocurrido este año, una comisión creada en el Consejo estudiará ahora qué tipo de contratos tiene suscrito cada hermandad, para plantear medidas, soluciones o mejoras en las condiciones y, sobre todo, garantizar la seguridad jurídica que rodea a las marchas procesionales que suenan detrás de los pasos procesionales.

Ayuda económica

Otra cuestión aprobada en el pleno de esta noche ha sido la de eximir a las cofradías este año de abonar la inmensa mayoría de partidas económicas con las que contribuyen al sostenimiento del Consejo de Hermandades. Una medida excepcional que ha presentado la permanente que preside Juan Carlos Jurado y con la que se pretende colaborar en la delicada situación económica en que han quedado la mayoría de hermandades.

Este año 2020, por tanto, las cofradías no aportarán al Consejo las cantidades económicas estipuladas para diferentes seguros, para la formación, el pregón de la Semana Santa y demás gastos comunes, entre los que se incluye la cuota de sostenimiento del Secretariado de Hermandades, organismo que hace unos días ya anunció que no recibiría este año esa cantidad (50 euros por hermandad).

El gasto para el mantenimiento de la sede del Consejo y el del fondo de solidaridad –que se ha reducido un tercio teniendo en cuenta la amplia labor que las hermandades han realizado en estos meses– son las únicas partidas que seguirán aportando las cofradías este 2020. De hecho, se ha acordado que ese fondo social se pueda utilizar cuando sea preciso, sin esperar al calendario habitual (que establece disponer de la cantidad en el mes de octubre) debido a las circunstancias extraordinarias actuales.