En paralelo a la configuración horaria de la Semana Santa 2020, el Consejo de Hermandades viene trabajando también junto al Ayuntamiento en la infraestructura que abraza al tránsito de las cofradías por la carrera oficial. En este sentido, el punto de partida es el mantenimiento del actual itinerario (Nueva, San Juan de Dios, Pelota, Catedral, Compañía, Santiago, Candelaria, Montañés, Palillero y Novena hasta el cruce con Barrié y Valverde) que parece consolidarse después de dos años.

Tras las mejoras que ya este 2019 se hicieron en la carrera oficial, especialmente con la instalación de palcos en la parte central de la plaza de San Juan de Dios, el Consejo quiere seguir mejorando este recorrido común de las cofradías de penitencia. Y para ello trabaja en varios proyectos que están estudiando y debatiendo también técnicos municipales y concejales del Ayuntamiento, incluyendo al propio alcalde de la ciudad.

El principal proyecto al que aspira la permanente que preside Juan Carlos Jurado de cara a 2020 es ampliar el número de palcos en San Juan de Dios, instalando nuevas estructuras en el tramo que discurre por delante del Ayuntamiento (y la acera de enfrente) de manera que continúen las estructuras ya colocadas este año.

Al mismo tiempo, sigue reclamando el Consejo la construcción de nuevos palcos que se sitúen en una segunda fila respecto a los del año pasado y que sigan permitiendo la normal visión de los desfiles procesionales sin obstáculos a aquellas personas que quieran ver las cofradías por San Juan de Dios sin ocupar sillas ni palcos.

Otro proyecto avanzado es el del estrechamiento del pasillo entre los palcos de la plaza de la Catedral, que viene intentando el Consejo desde hace unos años y que quiere conseguir ya para 2020, en principio mediante la habilitación de una nueva fila de palcos que estreche el más que amplio pasillo actual por el que discurren los cortejos.

De igual manera, se ha acordado ya estrechar el pasillo que queda cuando las cofradías salen de la Catedral, en la calle Arquitecto Acero, que también era excesivamente amplio para el tránsito de los cortejos procesionales.

Una última medida que vendrá a aliviar el discurrir de las procesiones, especialmente en lo relacionado al mundo de la carga, es el rebaje del escalón existente en la unión de Arquitecto Acero con Catedral, donde se instalará una pequeña rampa para evitar caídas y otras dificultades.

Estos son, por tanto, los principales objetivos sobre los que lleva meses ya trabajando el Consejo de cara a esa Semana Santa de 2020 que ya se dibuja en el horizonte.