El complicado trance que la gaditana hermandad de Humildad y Paciencia atraviesa desde el domingo, cuando la esquina delantera derecha de su paso de Cristo fue arrancada por un individuo en el interior de la iglesia de San Agustín se va a ver aliviado, en parte, con la restauración de este destrozo. Según ha confirmado el hermano mayor, David García, la pieza sustraída va a ser repuesta en unos trabajos de urgencia que previsiblemente estarán a tiempo para la procesión de esta cofradía el Domingo de Ramos.

El restaurador Fabián Pérez Pacheco, responsable de la empresa Ars Nova, será el encargado de realizar esta actuación, que consistirá en la talla del elemento arrancado, para proceder luego a su estucado, su dorado y posterior pegado. De este modo, la esquina afectada y el paso en su conjunto saldrán en perfecto estado, como si no se hubiese producido ese incidente el domingo.

“Ayer a mediodía (por el lunes) surgió esa posibilidad, cuando Fabián vino a ver el paso y los daños sufridos”, cuenta David García, que confía en que efectivamente esos trabajos que ya ha comenzado el restaurador se puedan realizar en estos cinco días que restan para el Domingo de Ramos.

Para ello, han sido retiradas del paso tanto la esquina dañada como la trasera derecha, que servirá de modelo para tallar la pieza arrancada. “Damos por hecho que la pieza no va a aparecer”, lamenta el hermano mayor en relación a esta actuación de urgencia que se va a desarrollar en el paso de Humildad y Paciencia.

El paso de Humildad y Paciencia, con la esquina retirada para su restauración.

Fabián Pérez conoce de manera profunda el paso de la Humildad, ya que en 2016 le aplicó una restauración integral, manteniendo desde entonces el contacto con la hermandad del Domingo de Ramos en relación a la conservación de esta obra de talla creada en 1954 por Rafael Fernández del Toro bajo diseño de Juan Pérez Calvo. “Ha sido un disgusto grande, pero parece que tendrá solución. Costosa, pero solución”, respira el hermano mayor en relación a esta buena noticia después del desagradable incidente del pasado domingo.