En el seno de la hermandad del Santo Entierro están “tocados”. Su hermano mayor, Fernando Díaz, al que se agradece su absoluta sinceridad y el modo en que afronta lo ocurrido el Sábado Santo, afirma que la decisión de regresar a Santa Cruz tras entrar en la Catedral por los problemas de carga del paso de la Virgen de la Soledad responden únicamente a la junta de gobierno, que tomó la decisión “por responsabilidad” ya que “no había condiciones para continuar el recorrido”, según indica el hermano mayor.

“Poner en peligro a los cargadores era algo impensable para la junta de gobierno. Y ese fue el principal motivo”, asegura Díaz, que no esconde que también tuvieron en cuenta que en las circunstancias en las que andaba el paso de Soledad se hacía complicado llegar a Santa Cruz antes de las diez de la noche, hora límite de recogida para la posterior celebración de la Vigilia de Pascua.

Esta misma semana quiere la junta de gobierno mantener las reuniones pertinentes con los responsables de la cuadrilla de cargadores, a fin de conocer de primera mano lo ocurrido el Sábado Santo, sin precedentes en la Semana Santa gaditana. Pero Fernando Díaz ya avanza que las hermandades de la recta final vienen notando serios problemas para confeccionar las cuadrillas. “Es injusto decir que no lo veíamos venir porque había una preocupación en general por el tema de la carga, porque vemos que conforme avanza la semana estamos inquietos por la falta de cargadores”, explica el hermano mayor.

En el caso de Soledad, varios serían los factores que influyeron en lo ocurrido el Sábado, relacionados siempre con la falta de cargadores, especialmente en los palos de la izquierda, además del fuerte calor que reinó esa tarde, “que no lo justifico como excusa”, apresura a precisar Fernando Díaz. En ningún caso se debe a reformas en la parihuela ni cambio de los palos, "como he leído y oído por ahí", puntualiza.

De hecho, recuerda el hermano mayor que los capataces ya actuaron como tales en 2019, “sin que hubiera problema ninguno ese año” y contando el pasado sábado “con el 90%” de aquella cuadrilla; una cuadrilla, además, de fuerte implicación en la vida diaria de la hermandad, con algunos cargadores “que llevan desde 1989 sacando la Virgen”.