Más de un centenar de denuncias se han impuesto en el primer día del cierre perimetral que se aplica a la ciudad de San Fernando tras las nuevas medidas aprobadas por la Junta de Andalucía para controlar la propagación del Covid-19. 

El municipio isleño, con una tasa de contagio que supera con creces los 500 casos, es uno de los 12 municipios de la la provincia -y el  único de toda la Bahía- en el que se están aplicando estas restricciones a la movilidad. 

Los controles policiales -tanto por parte del Cuerpo Nacional de Policía como de la Policía Local- se llevan a cabo desde la madrugada del domingo en los accesos de la localidad: en el nudo de Venta de Vargas y en La Ardila-Fuente Tusquets.

No son controles permanentes pero sí se llevan a cabo de manera intermitente, tanto por la mañana como por la tarde y la noche. 

A pesar de ello, el primer día del cierre perimetral -el domingo- se interpusieron 50 denuncias por saltarse las restricciones de movilidad que afectan al municipio. 

Hasta 42 impuso el Cuerpo Nacional de Policía en los controles que llevó a cabo. Y un total de 8 los agentes de la Policía Local isleña. 

Hoy han continuado estos controles aleatorios en los accesos de la ciudad.