Aguas de todos los océanos del mundo recogidas por el buque escuela Juan Sebastián de Elcano, el Juan Carlos I, la fragata Méndez Núñez, el buque de investigación oceanográfica Hespérides, el submarino Mistral, el cazaminas Tajo y por el contingente de Infantería de Marina desplegado en Mali han sido vertidas en el salón del cenotafio del Panteón de Marinos Ilustres en el transcurso de una simbólica ceremonia que se ha desarrollado esta mañana y que ha formado parte de la conmemoración de su 150 aniversario.
Cuatro alumnos del curso de acceso a la Escala de Suboficiales se han encargado de vaciar estas aguas en la piscina que se encuentra en el interior del Panteón mientras rendía honores un piquete de la escuadra de gastadores del batallón de alumnos.
A este simbólico gesto siguió la jura de bandera de la LXXXIV promoción de acceso a las Escalas de Suboficiales de la Armada, pertenecientes al Cuerpo General y al Cuerpo de Infantería de Marina, en la que han participado 226 alumnos.
Los actos han estado presididos por el Almirante General Teodoro Esteban Lopez Calderón, Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada. Y a ellos se suma también la conferencia que en el día de ayer ofreció el almirante Rodríguez Garat, director del Instituto de Historia y Cultura Naval.
Durante la jura de bandera tuvo lugar el acto de homenaje a los que dieron su vida por España, al principio del cual se mantuvo un minuto de silencio en recuerdo de todos los fallecidos por la pandemia del Covid-19.
Debido a los protocolos establecidos, el acto no contó con la participación de autoridades civiles, y tampoco asistieron familiares y amigos de los alumnos, como suele ser habitual.
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