La aventura ha comenzado. Supervivientes ha arrancado por todo lo alto y las celebridades que se han atrevido a aceptar el reto ya se encuentran en Honduras, peleando contra viento y marea para aguantar el máximo tiempo posible en los Cayos Cochinos. Lo que nadie se esperaba es que Ion Aramendi se tuviera que enfrentar al primer protocolo de abandono, tan solo 72 horas después del estreno.

Patricia Donoso ha sido la aventurera que ha decidido poner fin a su andadura en el reality más famoso de la televisión. La celebrity, que se hizo popular hace unos meses tras explicar en Sálvame su relación con múltiples famosos de medio mundo, ha chocado de frente con la realidad de un programa como Supervivientes. "Yo pensaba que esto era un reality show, pero es pura realidad. Mis compañeros tienen dolor de barriga, estamos pasando hambre, esto es muy duro", ha explicado Donoso ante las súplicas de Aramendi de que no abandonara el programa tan pronto.

🚨 PROTOCOLO DE ABANDONO 🚨Patricia Donoso amenaza con abandonar #Supervivientes2023 😱No te pierdes 'Supervivientes: Conexión Honduras', esta noche a las 21:30h en @miteleplus y a las 22:00h en Telecinco https://t.co/FOmgcyk5Yk pic.twitter.com/t8bF6v1AaK

— Supervivientes (@Supervivientes) March 5, 2023

Pese a recibir palabras de apoyo por parte de sus compañeros y de integrantes del equipo del programa, Patricia Donoso no ha querido seguir alargando su agonía. Es por ello que ha puesto todas sus pertenencias en el saco y se ha dispuesto a abandonar la playa de los Royales en barca. "Le hemos dado tiempo y espacio, pero se ha obcecado", ha asegurado Diego López, que ha mantenido una relación muy íntima con Donoso en la preconvivencia. "Siento que le ha superado", ha añadido Adara Molinero.

Por su parte, Gema Aldón ha asegurado que "hubo un momento en el que tuvimos que pedirle que parara, porque nos minaba la moral y nos dejaba sin fuerzas". Sea como fuere, Patricia Donoso se ha dado un pequeño margen para reflexionar su decisión. Todo apunta a que sus operaciones estéticas están siendo un problema en su paso por la isla, pues precisan de un cuidado y de una revisión constante. Primeras necesidades que se quedan lejos de los privilegios que cuentan los Royales en los cayos.