La pedida de mano de Íñigo Onieva y Tamara Falcó ha sido uno de los eventos más esperados del año, y ahora se ha desvelado lo que se regalaron el uno al otro en esta especial ocasión. La velada tuvo lugar en la casa de Isabel Preysler, madre de Tamara, y contó con la asistencia de 25 invitados que disfrutaron de una noche inolvidable.

La madre de Tamara, Isabel Preysler, aprovechó la ocasión para dejar atrás el pasado y centrarse en el futuro. Según ha informado la periodista Beatriz Cortázar, Isabel ha dicho que "el pasado está borrado" y que quiere que su hija sea feliz junto a Íñigo. Estas palabras muestran una actitud abierta y positiva hacia la relación de su hija, a pesar de los problemas del pasado.

Tamara Falcó se ha decantado por una exclusiva tienda de decoración para confeccionar la lista de regalos de boda.

En cuanto a los regalos de la pedida de mano, Tamara le obsequió a Íñigo con un reloj de lujo valorado en 50.000 euros, mientras que él le entregó una pulsera única, diseñada por un escultor de la familia Onieva. Se trata de un regalo muy personal que demuestra el amor y el compromiso de Íñigo hacia Tamara.

La pedida de mano de Tamara e Íñigo ha sido una de las más esperadas del año, y ha generado mucha expectación entre los medios y el público en general. La relación de la pareja ha sido objeto de rumores y especulaciones en los últimos meses, pero con esta pedida de mano parece que han dado un paso firme y decidido hacia el futuro juntos en los próximos meses.

La pareja se casará en verano. Está por ver qué regalos acaban apareciendo en la fecha nupcial, mientras tanto, los regalos de la pedida de mano demuestran el amor y la dedicación de ambos hacia su relación, y auguran un futuro lleno de felicidad y compromiso.