Bertín Osborne ha tenido un comienzo de año más que difícil, marcado por eventos que han afectado tanto su vida personal como a su salud. Tras el nacimiento de su séptimo hijo el pasado 31 de diciembre, fruto de una brevísima relación con Gabriela Guiilén, Osborne se ha visto inmerso en una serie de acontecimientos dramáticos (como sus declaraciones sobre la paternidad).

La noticia del fallecimiento de Paco Arévalo, uno de sus amigos más cercanos, ha impactado profundamente a Bertín. Arévalo perdió la vida en su domicilio de manera inesperada, tras varios días de indisposición. Lamentablemente, Osborne no pudo despedirse personalmente de su amigo, ya que se encontraba enfrentándose a problemas de salud relacionados con el coronavirus.

Bertín Osborne junto a Gabriela Guillén

A pesar de su deseo de rendir homenaje a Arévalo, Bertín Osborne no pudo viajar a Valencia para asistir al último adiós del humorista debido a las restricciones derivadas de su estado de salud. El coronavirus ha afectado negativamente a Osborne, impidiéndole cumplir con sus compromisos y obligándolo a cancelar uno de sus conciertos programados.

El concierto que estaba previsto para el 8 de enero en Alicante ha sido suspendido, según ha informado el programa de Telecinco Fiesta. La salud de Bertín no solo se ha visto afectada físicamente, sino también emocionalmente, ya que los eventos recientes, como la pérdida de su amigo y la imposibilidad de despedirse de él, han tenido un impacto significativo en su estado anímico.

Bertín Osborne junto a Pablo Motos

Kike Calleja, colaborador del programa, ha revelado que Osborne está experimentando efectos secundarios del coronavirus, llegando al punto de tener dificultades para hablar. "Hoy prácticamente no podía ni hablar", ha afirmado Calleja, quien también ha señalado que el cantante está muy afectado por la pérdida de Paco Arévalo y por no haber podido asistir a su funeral.

Bertín Osborne se enfrenta a un difícil inicio de año, lidiando con problemas de salud relacionados con el coronavirus, la pérdida de un amigo cercano y la cancelación de compromisos profesionales. Seguramente ahora tendrá más tiempo para dedicárselo a su séptimo hijo, al que todavía ni ha visto.