El comité de empresa de Navantia Puerto Real ha expresado este jueves su decepción por la falta de inversiones en la factoría después de que el consejo de administración de la SEPI aprobara el pasado viernes, en víspera de elecciones, que destinará 100 millones al astillero de Ferrol y otros 31 a San Fernando. "Es un chasco importante que muestra que nuestro astillero corre peligro", ha señalado la presidenta del comité, Marga Forné, tras una reunión con el subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Pacheco.

Los representantes sindicales confiaban en que la SEPI también desbloqueara el BAM-IS, del que no ha vuelto a haber noticias desde que en febrero se anunciara que "en breve" se iniciarían los trabajos de ingeniería. El comité ha trasladado a Pacheco su inquietud por la falta de contratos de construcción de barcos. En ese sentido, han denunciado el el "incumplimiento" del plan industrial de la empresa naval y , en el que se contempla además del BAM-IS, la construcción en Puerto Real de ferris para el Ejército de Tierra.

La reunión de este jueves es la respuesta al escrito que el comité presentó en octubre tras concentrarse frente a la Subdelegación del Gobierno. El encuentro se ha desarrollado en un "clima cordial", según Forné, que ha señalado que Pacheco es conocedor de la situación del astillero y se ha comprometido a trasladar sus peticiones a la SEPI y al Ministerio de Hacienda. 

Por su parte, el subdelegado del Gobierno ha señalado que se hace cargo de las reivindicaciones del comité.  "No podemos olvidarnos de que el astillero de Puerto Real está concebido para fabricar barcos”, ha expresado Pacheco en un comunicado, donde resalta que tanto para el Ministerio de Hacienda como para la presidencia de Navantia, Susana de Sarriá, “Cádiz es una prioridad para el Gobierno de España y el astillero de Puerto Real está presente en el reparto justo de las cargas de trabajo de la empresa estatal”.

El representante del Gobierno de España en la provincia les transmitió su conocimiento de los tres astilleros de la Bahía. “Les he dicho que cuenten con la Subdelegación como un aliado a la hora de trasladar la prioridad de la zona como destino para nuevos proyectos y el cumplimiento del plan estratégico aprobado recientemente”, ha incidido. En la misma línea Pacheco apuesta “por mantener una estrategia común de acción del conjunto de la Bahía". "Juntos seremos más fuertes a la hora de transmitir las posibles mejoras y capacidades”, ha resaltado. 

El comité de empresa tiene previsto celebrar un pleno a finales de la semana que viene para valorar las movilizaciones que se han realizado y elaborar una propuesta que debe ser votada por la asamblea de los trabajadores. "La situación actual es de carencia de carga de trabajo de nuevas construcciones. En cambio, vemos movimientos políticos y estratégicos que apuntan a que sí va a haber barcos pero no para Puerto Real. Eso nos tiene muy alarmados y muy alerta", ha advertido la presidenta del comité. 

Carga de trabajo

Desde la entrega del último petrolero para Ibaizábal, la factoría gaditana no tiene ningún barco en cartera, salvo la construcción de varios módulos para el contrato de las corbetas que se está ejecutando en Navantia San Fernando. Además, en los próximos meses llegarán cinco cruceros para ser reparados, ante la falta de espacio en el astillero de Navantia Cádiz, según anunció la presidenta de la empresa pública, Susana de Sarriá, el pasado mes de julio.

La principal actividad de Puerto Real en estos momentos es la finalización de tres contratos relacionados con el negocio off-shore. En agosto celebró el acto de corte de la primera chapa de una plataforma para un campo petrolífero en Noruega. Asimismo, está enfrascada en la construcción de 20 soportes para el parque eólico marino Moray Firth Offshore East, y en la estructura de un molino flotante para el campo Kincardine, ambos en Escocia.

Con estos encargos, Puerto Real cuenta con carga de trabajo durante algo más de un año para más de 3.000 trabajadores, según resaltó el director del astillero Bahía de Cádiz, Javier Herrador, en agosto. Sin embargo, los representantes sindicales han insistido en numerosas ocasiones en la infrautilización del astillero, que cuenta con uno de los mayores diques secos de Europa.