Hipocresía

YA decía Quevedo en el XVII que "la hipocresía exterior, siendo pecado en lo moral, es grande virtud política". No le faltaba razón. En nuestra ciudad hemos tenido la oportunidad de observar bien de cerca ese palabro tan bajuno en su contenido y tan carente de verdad. Cuánto desparpajo han tenido determinadas asociaciones y partidos políticos de El Puerto a la hora de opinar sobre la ubicación del Centro de Emergencia Social en Los Frailes. La hipocresía es un tipo de mentira. Como estamos hartos de oír a los colectivos vecinales que se gaste mejor el dinero de todos, y que la solidaridad y la mano tendida al necesitado debe prevalecer, no entiendo como es posible que los vecinos de los Frailes defienden a muerte que en vez del Centro, la parcela sea zona verde. Montan 'el pollo' con cacerolada incluida frente al área de bienestar social para no para que se amplíen los recursos de carácter de apoyo familiar y sociosanitario que capitanea Anydes. Curioso.

Pero lo más triste es que la FLAVE trate de contentar a todos y dice sin pudor que "considera lógicas las razones esgrimidas por los vecinos de Los Frailes". En la misma nota llega la hipocresía: "es un proyecto necesario para la ciudad pero que había que buscar un espacio adecuado, siendo importante que no se pierda la subvención para el mismo". Es como el chiste: la bicicleta no, que es mía. Inaudito.

En el terreno político aún me pregunto si todo vale. Julio Acale, con tal de ir contra el PP utilizó un argumento que por inconsistente, sólo le duró un rato. Que si lo que nosotros votamos en el pleno fue que se construyera el centro, nunca donde. Ahí queda eso. Y por si fuese poco, la hipocresía en su máxima expresión. Leo en la prensa: "la Asociación de Mujeres por la Ciudadanía se ha mostrado de acuerdo con la necesidad de construir un centro de emergencia social, pero cuestiona que se haga en La Florida, como ha acordado el Ayuntamiento, y se pregunta si no hay terreno en otra parte de nuestra ciudad para construirlo, para no cargar más la Zona Norte. Paradojas de la vida.

Decía Bertolt Brecht que cuando la hipocresía comienza a ser de muy mala calidad, es hora de comenzar a decir la verdad.