San Fernando CD: confío en Monchi

No creo en el mal por el mal, en líneas generales. Sé que existe, que pudre las almas de los hombres, pero como dijera aquel sabio: son negocios, no es personal. Por eso creo y confío en que se solucione el problema del San Fernando CD, en que el grupo accionista mayoritario cambie de opinión y decida transmitir su participación en el club en vez de liquidar la Sociedad Anónima Deportiva isleña.

La negociación va a ser dura, muchísimo. Menos mal que en el bando azulino se encuentra Monchi, que es un experto en estas lides. Tal y como yo lo veo desde fuera aun no se ha alcanzado el precio adecuado. Es decir, hay un grupo que quiere recuperar una inversión, y tiene el plazo del 15 de julio a su favor. Si transcurre y el SFCD no se inscribe en las próximas competiciones, la entidad estará muerta sin remisión y MTM liquidará la entidad. Por eso piden ahora que los aficionados inunden con miles de mails los buzones de la Federación, del CSD o de quien sea. El objetivo es conseguir una moratoria de ese plazo para poder seguir negociando el máximo tiempo posible. Si el plazo aumenta, menor fuerza tendrá el grupo MTM. Teóricamente.

No puedo sino recordar el tiempo que pasé en el club, los presidentes con los que traté, con los que disfruté de victorias y ascensos, y con los que sufrí derrotas y, por qué no decirlo también, alguna decepción. Gente que no veía el San Fernando como un negocio, sino como un sentimiento. Cuando esa gente que todos conocemos aunque no la nombre dejó de encabezar el San Fernando, la nave empezó a escorarse, porque dirigir un club como el azulino no era ya personal, sino negocios.

Desconozco qué ha podido pasar en Caño Herrera s/n; como digo hace ya varios años que di un paso a un lado y me aparté en todos los sentidos, pero recuerdo una vez en que el oleaje venía embravecido: bajé a los vestuarios para ver a Monchi hablar de tú a tú a los futbolistas, que lo agradecieron. Por eso creo que este isleño internacional puede tener la clave para desbloquear la situación con MTM, llámese contactos, conocimientos, fondos o apoyos. Si él no puede, dudo que nadie más lo consiga. En el zoco hay que tener aptitudes y actitudes concretas, no vale cualquier tipo de artimaña. Son necesarios maestros del regateo, de la planificación estratégica, y gente con carisma. Por eso creo que Monchi acabará salvando la situación. Tengo fe en él. Y la tengo porque conoce este mundo y el otro, el del césped y el de las moquetas. Mundos donde abundan los y las pelotas, y en donde el dinero acaba mandando. Sólo hay que encontrar, como decía Groucho, el precio adecuado.